Grever pasó toda su vida produciendo cientos de canciones que luego fueron versionadas por algunos de los artistas más famosos del mundo, como Plácido Domingo, Aretha Franklin y Frank Sinatra. En este día de 1938, Grever grabó “Ti-Pi-Tin”, un vals sobre dar una serenata a sus seres queridos que se convirtió en uno de sus mayores éxitos.
María Joaquina de la Portilla Torres nació a finales del siglo XIX en la ciudad de León en el centro de México. De niña se trasladó a Sevilla, donde estudió inglés, francés y música. Las habilidades musicales naturales de Grever fueron evidentes cuando compuso un villancico navideño para su escuela. Esto llevó a su padre a proporcionarle algunos de los mejores tutores, incluidos distinguidos compositores, Debussy y Lehár. Su primer disco, "A Una Ola" ("To a Wave", 1912), vendió millones de copias y, finalmente, fue versionado por varios cantantes.
En 1916, Grever se mudó a Nueva York, donde pronto compuso música de fondo en películas para Paramount Pictures y 20th Century Fox. Mientras tanto, Grever continuó produciendo canciones que unían ritmos folclóricos con estilos como el tango para cautivar al público de América y España. Algunos de sus mayores éxitos incluyen “Júrame” (“Promise, Love”, 1926) y “What a Difference a Day Makes” (originalmente “Cuando Vuelva a Tu Lado”, 1934). Este último ganó un Grammy en 1959 interpretado por la leyenda del jazz, Dinah Washington.
En reconocimiento a sus contribuciones a la música, la Unión de Mujeres de las Américas (UWA) nombró a Grever "Mujer de las Américas" en 1952.
Gracias por toda la música María Grever; ¡Hoy sigue tocando la fibra sensible de los oyentes de todo el mundo!