El 10 de julio de 2021 quedará guardado en la memoria colectiva de todo el pueblo argentino. Los futboleros –y los que no-tendrán marcada esta fecha como la primera vez que Lionel Messi pudo consagrase campeón vistiendo la camiseta celeste y blanca, la de Argentina.
Una final épica, en Brasil, en la casa del rival de siempre, con toda la carga emotiva sobre los futbolistas que ingresaron al Maracaná para disputar el último partido de la competencia. Finalmente el resultado fue 1 a 0, con gol de Ángel Di María en el primer tiempo para que al cierre, luego del pitazo final, el equipo alzara la Copa América.
Una copa más descansará desde ahora en las vitrinas de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) y el gran responsable de que así sea es Messi -goleador y mejor jugador de la competencia- y todo un equipo que confió en él y siguió sus pasos. Se le dio, rompió una racha y se sacó la “mufa”.
Un grito atragantado durante 28 años. La última vez que la Selección se había consagrado fue en el 93, cuando el capitán albiceleste tenía apenas 8 años. Un dato no menor en este momento emotivo, que no se puede pasar por alto, es que es la primera tras la muerte de Diego Maradona, con todo lo que eso significa. El legado de Diego a Lio está más firme que nunca tras la consagración.