Estados Unidos está convulsionado luego del horror que se vivió en el Centro de Entrenamiento que tiene Matías Almeyda en Texas. Según medios locales, un hombre ingresó armado al predio y, sin mediar palabra, le disparó a su expareja, que estaba embarazada y al novio de ella.
El hecho ocurrió el domingo 25, cerca de las 10 de la mañana, mientras los hijos de los abatidos estaban jugando un partido de fútbol. Los testigos comentaron que se vivieron momentos críticos y de mucha tensión por las circunstancias, ya que pensaban en una masacre por la cantidad de personas que había. Sin embargo, se dirigió a esos dos individuos.
El informe policial sostiene que cuando ellos llegaron, luego del llamado desde la Academia Almeyda Park, se encontraron con tres personas fallecidas. Lo que se informó es que el agresor, minutos después de llevar adelante su cometido, se suicidó.
Las víctimas, un hombre de 35 años, murió en el acto luego de recibir varios impactos de bala; mientras que la mujer, aún con vida cuando llegó la ambulancia, fue trasladada a un nosocomio. Allí se conoció la muerte de su bebé y horas más tarde la suya.
A través de un comunicado, Matías Almeyda, actual entrenador de San José Earthquakes, habló del tema. "Nuestros corazones y oraciones están con las familias involucradas en la tragedia ocurrida el domingo por la mañana. Si usted o alguien que conoce puede estar sufriendo abusos domésticos, por favor no dude en pedir ayuda".
En las redes sociales del centro de entrenamiento también ofrecieron sus condolencias.