FUERTE TESTIMONIO

Depresión, ira, violencia: Patricia Pacheco habló como nunca del oscuro infierno que vivió Rodrigo con las drogas y las presiones en su carrera

La expareja del cordobés y madre de su hijo Ramiro habló con Gastón Pauls en el programa Seres libres

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Si hay alguien con autoridad para hablar de la vida y de la muerte de Rodrigo es Patricia Pacheco. De la vida, porque no solo fue su expareja sino además es la madre de su hijo Ramiro y fue testigo de su éxito y de infierno. Y de la muerte porque ella viajaba junto a su por entonces bebé de dos años en la Ford Explorer en la que el 24 de junio del 2000 el popular cantante cordobés encontró la muerte en un accidente.

Han pasado 22 años. Patricia accedió a dar una entrevista pero esta vez no la interpeló un periodista. Su diálogo fue con alguien que, al igual que Rodrigo, conoció los estragos que produce la droga: Gastón Pauls. Estas fueron las sinceras revelaciones de Pacheco en una charla intimista en el programa Seres libres.   

   

"Cuando yo lo conocí, él  ya consumía cocaína y consumía mucho, muchísimo. Tenía plata para hacerlo y 
tenía un entorno en el que también consumían todos. En los momentos en el que él no estaba en ese consumo, era un pan de Dios y después se transformaba en una persona, no sé cómo explicarte... mala.  Veo como que (la droga) te da una voluntad o un dinamismo que no es el tuyo, que no es la verdad de tu ser, que no te va a llevar a ningún lado porque no estás actuando en tu persona. Y también veo que generaba violencia, violencia y violencia".

"Cuando se iban todos y él quedaba solo, entraba en cuadros de violencia contra él mismo. O sea, se golpeó la cabeza contra la pared, lloraba. Tenía problemas con el trabajo, emocionales también, pero bueno, generaba violencia, violencia contra él. Yo no hablaba. Yo solo podía verlo y me dolía, Me acuerdo que una vez llegó de un baile y para abrir la puerta rompió todos los vidrios con un pie."

"Cuando yo me fui, que lo dejé estando embarazada de ocho meses porque él nunca me dejó a mí, yo siempre lo dejaba, rompió todo el hotel. Empezaba así, a romper cosas. Igual cuando yo lo conocí él ya consumía demasiado y ya se golpeaba la cabeza contra las paredes, escupía, todo ese tipo de cosas".

 "En el tema del padre de mi hijo, no había uno que no le convenía que estuviera todo el día tomando merca. Porque tomaban todos con él. El estaba en un estado de de consumo y tenía dinero. Y la noche que es difícil dejarla, la música, las chicas... Es muy difícil dejar todo eso para un hombre. Y también eso era lo que lo hacía a su vez alejarse de todos esos problemas con los que se encontraba después cuando estaba solo y encima lleno de nervios".

"Recién ahora se puede hablar un poco de esto, porque en ese entonces no se podía decir nada. Porque a todos les servía la figura pública de él, exitoso y talentoso, y cuanto éxito, y cuánta guita podés levantar, y 'qué bien que la estás pasando' y en realidad tenía unos dramas y estaba hasta el cuello de problemas y de presiones. Y de depresión también por la muerte del padre y por el consumo..."

"¿Los momentos más crudos? Todo el tiempo era crítico y doloroso, por lo menos para mí, que era la madre del hijo. Era diario, se levantaba y al rato ya estaba tomando. Y cuando empezaba la noche, el alcohol, las salidas, él no daba más con con su cabeza, con sus problemas, con la presión".  
 
 "Es bueno que la gente aunque no le guste, escuche y también entienda. Y que cuando escuche, lo escuche a él, no a la imagen que vendió de lindo y de exitoso, con lo bueno y con lo malo. Porque también era una hermosa persona; era valiente, era gracioso, era fuerte porque se cargaba al hombro mantener a un montón de gente, producir un montón de dinero para que los demás tengan, mantenía a sus familias. Pero la cocaína apagaba todo eso. Si no hubiera pasado esto (el accidente), hubiera pasado cualquier otra cosa."

"El consumo él no lo podía parar y aparte tenía otros problemas, que también eran tan dramáticos o peores que el consumo.  Era una situación en la que él no era dueño de su persona ni de lo que hacía y de nada, no tenía libertad. Estaba sometido a un contrato en donde había vendido todo. No sé por qué se entregó de esa manera, para mantener a su familia o para mantener los músicos, para lo que sea, y no tuvo donde caer y cayó en ese contrato en el cual eran dueños de él".


 
"Esa noche (la del accidente) él había tomado y decidió manejar. Me senté adelante y el nene iba atrás con uno de los chicos. Ahí cuando llegamos a un peaje, se empezó a poner loco porque no podía pasar porque no tenía la tarjeta del pase.  Entonces fue para un costado de la ruta, ahí orinó, y empezaron a parar todos los que venían atrás que habían ido al baile.  (...) El se quedó ahí hablando, se subió a la camioneta, tomó, convidó, y cuando pasa el peaje, nos pasa esta camioneta, lo hace como vibrar y él salió como tiro. La otra tenía una velocidad también importante como para agarrarla. Yo cuando empezó a tomar velocidad agarré al nene, yo me había agarrado de acá (hace el ademán de tomarse de una de esas manijas que están al costado y en las que se puede enganchar la visera parasol) después bajé la mano y se la puse en la cabeza, o en la espalda. (...) Yo tenía unas plataformas y con mis pies iba haciendo presión para abajo y me empecé a hacer bolita. Fue una cosa impresionante, (el auto) se iba para un lado, para el otro, se ve que lo quería pasar. Empezó como a frenar atrás (del otro auto) y en un momento se va para el costado y empieza a dar giros la camioneta, como tres o cuatro tumbos. Imagínate la velocidad que tenía para que los cuerpos hayan salido despedidos así. Yo me quedé ahí hecho una bolita y mis ojos cerrados, veía pasar cosas en mi cabeza y pensaba 'ya para, ya para.' Cuando paró la camioneta, me quedé sentada, estaba muerta viva, no entendía. Ahí entré en estado de shock"

"Fue una reacción que tuvo él y que tuvo el otro (Pesquera, el conductor del otro auto) también. Por eso fue tan traumático, porque
pienso que si no se hubiera tomado ese pase... O no sé, quizás no necesitaba eso para reaccionar porque reaccionaba por otras broncas que tenía, pero yo creo que eso lo ayudó también a tener esa reacción. Ese fue el final, o último que hizo fue tomarse un pase."

"Me pongo a llorar y me ahogo, no puedo soportar el llanto entonces resisto. Me pasó también que tenía al nene que tenía tres años y entonces tuve que aprender a hacerme fuerte. Y encima no tenía un peso. Mi familia me ayudó en todo, no tenía un peso y todavía no tengo un peso. Yo soy recruda con mis tres hijos, como no les puedo dar nada, los educo. Les dije: "No tomes porque en la sangre debés tener algún patrón que no vas a poder dominarlo. Entonces evitá eso". Yo no hablo de manera culposa de las drogas, ni de Rodrigo ni nada. Yo no estoy culpando a Rodrigo, ojalá que algún día lo entienda la gente. Yo lo amaba. Pero a mis hijos les dije 'yo te veo tomar a vos y me vas a conocer, no te quiero ver tomando, porque no salís más de eso'.  

"La cocaína es lo peor con lo que se puede topar una persona. No sé lo que es, pero sí pude ver lo que produce y no ayuda en nada, en absolutamente nada, no se puede dominar."