El pasado domingo primero de octubre se realizó el primer debate de los candidatos a presidente y sus declaraciones dejaron mucho para reflexionar y seguir intercambiando ideas.
Por su parte, con ánimo de analizar los mensajes emitidos por los candidatos, la producción de Desayuno Americano invitó a Hugo Lescano, un especialista en lenguaje no verbal, para que los analice.
"Este primer gesto me llamó mucho la atención", comenzó al señalar una imagen de Javier Milei con una lapicera en la mano. "Se llama control objetual. Ustedes me dirán: 'Bueno, cualquiera agarra una lapicera'. Pero, si ponen atención, la lapicera está invertida. Justo en ese momento, al comienzo, lo van a ver a Milei haciendo un gesto como que está tomando notas pero la realidad es que no puede tomar notas porque el capuchón de la lapicera indica que está al revés", detalló.
"Estos controles objetuales sirven para darnos cuenta de que a veces las personas agarran objetos sólo para gestionar emociones negativas. Milei tenía miedo al comienzo. Se lo vio con mucha tensión. Después se acomodó pero hizo una cantidad de movimientos sin coordinación", añadió Lescano.
Luego de esto, el especialista se enfocó en otro de los candidatos: "Tenemos otro gesto muy curioso y es que Sergio Massa quita su mirada del campo visual de la cámara. No quiere mirar a la cámara cuando Patricia Bullrich le hace una cantidad de reclamos en relación con fallas del gobierno actual. Lo que él hace entonces es comenzar a tomar notas".
"Este es un gesto muy particular que lo suelo ver en mis estudiantes. Ya sea cuando estamos en un examen o queremos hacer una pregunta más o menos difícil. Algunos miran para abajo, buscan cosas. Fue el único momento en que se lo vio a Sergio Massa sutilmente incómodo. Podría decirse que Bullrich fue la única persona que logró más o menos incomodarlo", sumó.
Finalmente, haciendo referencia a Patricia Bullrich, Lescano concluyó: "Este es un gesto muy común (ponerse las manos sobre los oídos) que solemos ver en grupos de amigos cuando se habla de temas que no queremos escuchar. Tanto hombres como mujeres lo que hacemos es acomodarnos el pelo y Patricia Bullrich se tapó los oídos literalmente en un momento en que Myriam Bregman le achacó cuestiones en las que ella participó en el gobierno de Mauricio Macri".
"Este gesto es muy común y no solemos fijarnos en estos detalles. Fue el único momento en que Bullrich se acomodó el pelo, o sea que no es un tic ni algo que haga comúnmente. Lo hizo como un reflejo de no querer escuchar lo que le decía Myriam", cerró el profesional.
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