Este jueves, los jueces Andrés Olié, Alejandra Ongaro y Daniel Sáez Zamora hallaron a Magdalena Espósito Valenti, progenitora de Lucio Dupuy culpable de homicidio triplemente agravado pero la absolvieron por el delito de abuso agravado. En cambio a Abigail Páez, su pareja, fue encontrada culpable de homicidio doblemente agravado y abuso sexual con acceso carnal doblemente agravado.
Las penas no se conocerán hasta la semana próxima pero para los delitos que se les adjudica es de prisión perpetua. Magdalena Espósito Valenti fue declarada autora material y penalmente responsable del delito de homicidio triplemente calificado por el vínculo, alevosía y ensañamiento, todos agravantes según el código penal.
Abigail por su parte, fue declarada culpable de homicidio calificado doblemente agravado -alevosía y ensañamiento- ya que no tenía vínculo con el nene. Pero la calificación fue en concurso real con el delito de abuso sexual. De este delito, la madre fue absuelta, lo que provocó la indignación de la familia de Lucio.
Tanto ellos como la fiscalía dijeron que no están conformes.
Las asesinas de Lucio escucharon la sentencia vía zoom desde su actual lugar de detención en San Luis ya que rechazaron la posibilidad de estar presentes en el Tribunal para escuchar el veredicto.
La condena se ajusta a lo solicitado tanto por la querella como por la fiscalía y descarta completamente lo requerido por la defensa, que en los alegatos pidió que la muerte de Lucio sea considerada como un homicidio preterintencional (delito con pena de 3 a 6 años) o bien como homicidio simple con dolo eventual (8 a 25 años)
La historia del crimen aberrante que estremeció a todo el país
El 26 de noviembre del 2021, Abigail Páez (pareja de Magdalena Espósito Valenti, la progenitora de Lucio) salió corriendo del departamento donde vivía en Santa Rosa, La Pampa con el pequeño en brazos. Decía haber sido víctima de un robo y que los delincuentes lo habían atacado. Los vecinos intentaron reanimarlo sin éxito por lo que junto a Magdalena lo trasladan hasta el Hospital Evita.
Los médicos que lo atendieron, intentaron todo para salvarlo pero fue imposible. La autopsia determinó que Lucio Dupuy tenía hemorragias internas, rastros recientes y antiguos de agresión sexual, fracturas de brazos y dedos y quemaduras de cigarrillo. La muerte fue provocada por los golpes.
El forense Juan Toulouse a cargo de la autopsia, declaró: “En mis 30 años de profesión nunca vi algo así, este nivel de ensañamiento no lo vi nunca".
En la versión del robo que había manifestado la pareja de la madre de Lucio nada cuadraba y los investigadores apuntaron a las mujeres que finalmente, terminaron acusadas por este crimen atroz.