El joven cuyo video se viralizó el pasado lunes por propinar una violenta patada a un árbitro durante un partido de fútbol amateur en Sarandí, ha sido encontrado sin vida. Según fuentes judiciales, se trató de un suicidio perpetrado con un arma de fuego. Ante la difusión masiva de la noticia, el joven identificado como Williams Alexander Tapón tomó la decisión de quitarse la vida antes de ser detenido por la policía bajo la acusación de "homicidio agravado por alevosía en grado de tentativa en el contexto de un espectáculo deportivo". "Hasta acá llegué", le habría dicho en un mensaje a sus familiares, angustiado por la situación que estaba viviendo.
El árbitro agredido había ratificado la denuncia que se inició de oficio, pero al percatarse de la magnitud del incidente y tras su recuperación, se presentó para prestar declaración. El caso está siendo tratado por la Unidad Fiscal de Instrucción número 4 de Avellaneda, a cargo del fiscal Mariano Zitto.
Como se pudo observar en los videos difundidos en las redes sociales, dos jugadores, incluyendo al agresor, se aproximaron de manera amenazante hacia el árbitro, lo increparon y comenzaron a empujarlo. Uno de los jugadores, quien había sido expulsado después de recibir dos tarjetas amarillas, continuó insultando al árbitro, mientras que el otro, sin mediar palabra, lo empujó y le dio una fuerte patada en la cabeza al hombre, dejándolo inconsciente. El árbitro fue trasladado de urgencia al hospital más cercano.