Si bien cada uno tiene sus propios trucos a la hora de llevar a cabo la limpieza de la casa, algunos son infalibles. En internet se pueden encontrar cientos de tips para limpiar de manera fácil y rápido el baño con poco presupuesto, en especial, el inodoro.
Por lo general, los cítricos suelen ser nuestros aliados a la hora de limpiar la casa. El limón, por ejemplo, es un alimento que, además de su función en la cocina, cumple un importante rol en la limpieza del hogar. Así que... ¡a no tirar las cáscaras de limón!
A la hora de llevar a cabo una correcta limpieza del inodoro, es necesario tener a mano cáscaras de limón. Pero, ¿cuál es el motivo? La realidad es que este cítrico es parte de un truco casero para remover las manchas más difíciles del baño.
Cómo limpiar el inodoro con cáscaras de limón
El primer paso para obtener un limpiador casero para el inodoro será licuar 8 cáscaras de limón, 1/2 litro de agua y bicarbonato. De esta maneras, vas a obtener una pasta de consistencia homogénea que luego deberás pasar por un colador y colocar en un recipiente.
Una vez que lo tengas listo, esparcí bien la mezcla en el interior del inodoro, deja que actúe durante unos minutos y frota con una escobilla. Este ingrediente casero es súper útil para limpiar el fondo negro y vas a notar que esta mezcla la removerá en apenas unos minutos.
El limón puede matar bacterias, eliminar el moho e incluso quitar el óxido ya que el ácido cítrico es antibacteriano y antiséptico. Los aceites de la cáscara también pueden ayudar a eliminar la grasa y las manchas, dejando los objetos de la casa limpios y relucientes.
Cómo limpiar el inodoro con vinagre y bicarbonato
En caso de no contar con cáscaras de limón, podes recurrir al uso de vinagre sobre las manchas marrones de la taza. Vas a tener que espolvorear bicarbonato sobre las manchas húmedas de vinagre, seguido de otra rociada de vinagre sobre el bicarbonato.
Luego, debes dejar actuar de 10 a 15 minutos. A continuación, vas a frotar la superficie donde está el bicarbonato húmedo con un cepillo de dientes viejo o con la escobilla. Es importante dejar reposar 30 minutos sin enjuagar y volver a frotar con el cepillo. Por último, tira de la cadena.