La Selección Argentina Sub 23 de fútbol vivió un debut olímpico marcado por la controversia en los Juegos de París 2024. El partido, que originalmente terminó 2-2 con un gol crucial de Cristian Medina en tiempo adicional, se vio envuelto en una serie de escándalos después de que se interrumpiera el partido por disturbios en las tribunas.
El escenario se tornó aún más caótico cuando, más de una hora y media después de haber interrumpido el encuentro, el VAR entró en acción para anular el gol argentino por un supuesto fuera de juego previo al tanto. Esta decisión arbitraria dejó a la Argentina con una derrota y desató una ola de críticas y cuestionamientos por parte del equipo y el entorno.
Lionel Messi no ocultó su malestar y decidió utilizar las redes sociales para expresar su incredulidad ante lo ocurrido: "Insólito", escribió el astro del Inter Miami en una historia de Instagram, reflejando así la frustración compartida por todo el equipo argentino.
El defensor de la Scaloneta, Nicolás Tagliafico, también se sumó a las críticas, cuestionando duramente las circunstancias del encuentro y el manejo del incidente: "Saliendo del circo, ¿vamos a hablar del motivo por el que se suspendió o nos vamos a seguir haciendo los boludos? Si hubiese sido al revés ni me imagino lo que estarían diciendo", expresó en su cuenta de X.
Además, Rodrigo De Paul optó por enfocarse en el apoyo al equipo de Mascherano de cara a los próximos desafíos: "¡Más que nunca con ustedes. ¡Pueden contra todos!", manifestó en un mensaje de aliento a sus colegas.
El próximo partido de Argentina por el Grupo B de los Juegos Olímpicos será el 27 de julio, a partir de las 10 (hora argentina), contra Irak.