Para visitar los mejores paisajes del mundo no hace falta cruzar todo el atlántico, sino que simplemente se recomienda apostar por la Patagonia. Es que allí se encuentra gran parte de la belleza de los paisajes de nuestro país. En este sentido, se dio a conocer cuál es el mejor pueblo argentino para visitar allí.
Es que en la Patagonia se encuentra un sitio muy especial que es comparado con los mejores paisajes de Europa. Ante esto, se reveló cuál es el sitio que se debe visitar para vivir una experiencia similar a la que se alcanza al visitar los Montes Pirineos, ubicados como frontera de España, Francia y Andorra.
Para llegar a un espacio similar se deberá viajar con destino a “El Refugio del Silencio”, como se lo conoce popularmente. Se trata de Villa Traful, ubicado en la provincia de Neuquén. Allí, se encontrará la misma paz que en Europa pero sin la necesidad de salir de nuestro país.
Se debe a que este espacio es parte del Parque Nacional Nahuel Huapi, por lo que para muchos es considerada una “Joya Escondida de la Patagonia". Esto se debe a que se encuentra a puntos turísticos cercanos como pero mucho más populares, como San Martín de los Andes y Villa La Angostura.
En este sentido, más allá de esta situación, en los últimos años ha ganado popularidad Villa Traful, aún siendo un pequeño pueblito. Se debe a que muchos los catalogan como un espacio mágico que se encuentra en la Patagonia y que no tiene nada que envidiarle a los sitios más bellos de Europa.
En lo que respecta a sus características más destacadas, una de ellas es el hecho de que la localidad rodee el lago acompañado por un terreno montañoso y de bosques. Otro detalle es la naturaleza al alcance de la mano, ya que allí se puede disfrutar de trekking, senderismo, pesca y deportes acuáticos para vivir una experiencia única.
Por último, vale la pena destacar que en Villa Traful la arquitectura es bella gracias a que las casas están hechas de piedra y madera. Esto se debe a que, según las normas de la ciudad, un alto porcentaje de las contrucciones tienen que ser en madera, para evitar la creación de torres que arruinen la armonía e idiosincrasia del pueblo.