El comportamiento de los animales no siempre es previsible. Los gatos, por ejemplo, suelen tener actitudes muy marcadas que los diferencian de otras mascotas. Ocurre casi en el 100% de los casos que, cuando un gato ve una caja vacía, va a intentar esconderse dentro de ella, al menos por unos minutos.
Esta actitud felina que puede resultar graciosa en un principio tiene vínculo con su instinto y el desarrollo de una característica muy particular. A diferencia de los perros, los gatos suelen tener comportamientos mucho más complejos y específicos de clase.
Existen diferentes motivos por los cuales los gatos deciden esconderse dentro de una caja vacía pero el principal se encuentra vinculado con la seguridad. A pesar de no haber un peligro inminente, muchos lo utilizan de refugio y como resguardo de amenaza.
Se supone que los gatos que viven en hogares se encuentran en condiciones ideales. Sin embargo, éste es un accionar que forma parte de su instinto y que los salvajes desarrollan para protegerse. Además, es una manera de mirar lo que sucede alrededor.