Si quieres empezar a probar quesos no lácteos, aquí tienes 3 recetas para empezar. Van por orden de complejidad y tienen no solo distinto sabor sino también distintas aplicaciones.
Entre los vegetarianos se conoce la receta del queso de papas, para usar en lugar de muzarella en la pizza; por ejemplo.
Para una pizza, se debe cocinar medio kilo de papas peladas cortadas en agua y sal. Una vez blandas, escurrir, procesar con 1 cdta de cúrcuma y 1 cucharadita de levadura nutricional, chequear el sabor y agregarle hierbas y pimienta a gusto. Esparcir sobre la pre pizza con salsa, hornear para que se caliente bien y servir.
Más sofisticados y menos económicos son los quesos de castañas de cajú, nueces o almendras, o de las tres frutas secas mezcladas. Tienen una consistencia untable. Esta es una receta básica.
Queso de almendras: Activar ( dejar remojar) ½ taza de almendras en agua caliente durante una hora. Retirar el agua, ponerlas peladas en la procesadora con un poquito de sal y un chorrito de aceite y batir. Luego añadir ¼ de vaso de agua y procesar de nuevo. Debe quedar como una pasta blanda. Añadir una cucharada de tapioca y volver a batir y por último agregar un poco de orégano y un poco de cúrcuma y batir de nuevo hasta que la mezcla quede homogénea. Se agrega en la pizza sobre la salsa y luego se calienta al horno.
Una receta que lleva tiempo porque se deja reposar por lo menos una semana es el queso de semillas de girasol.
Queso de semillas de girasol
Tiempo de preparación: 20 min. Tiempo de cocción: no necesita. Listo en: 1 semana
Para 1 queso pequeño
Ingredientes
2 tazas de semillas de girasol
1/2 taza de agua
1 limón, el zumo
1 ajo, aplastado y con la piel
1 c. pequeña de sal
1 pizca de pimienta recién molida
1/2 taza de hierbas aromáticas secas: tomillo, romero, orégano
Cómo se prepara
Remojar las semillas durante unas 8 horas. Descartar el agua de remojo y lavar las semillas. Colocar en un procesador o batidora de jarra y batir con el agua hasta obtener una crema blanca y suave. Añadir el resto de ingredientes excepto las hierbas aromáticas y batir bien de nuevo hasta que vuelvas a obtener una crema homogénea.
En un lienzo de algodón poroso, tipo gasa, colocar el queso fresco, anudar y colgar en la cocina para que se filtre el líquido durante unas 8 horas. También se puede dejar en un colador suspendido en un bol con un peso encima para que poco a poco suelte el exceso de agua.
Después de las 8 horas, sacar el queso del atado y dar forma con las manos. Colocar la 1/2 taza de hierbas aromáticas en un plato y hacer rodar el queso por las hierbas con cuidado hasta rebozarlo uniformemente.
El queso se puede comer en este momento pero durante el tiempo de estacionamiento cuando el queso mejora su sabor.
Para estacionar el queso, colocar sobre una rejilla para que se vaya secando y reservar durante una o dos semanas en un lugar seco, fresco y aireado. Dar la vuelta cada 12 horas para un secado homogéneo. Debe estar bien ventilado para evitar la formación de moho. En caso de que aparezca algún puntito de moho blanco, quitarlo y seguir secando.
Un dato: El moho, si es blanco, es alimentario, es decir, que no es nocivo para tu salud. Otra cosa diferente sería el moho verde o negro, no aconsejables de ingerir.