MUY ÚTIL

Tres maneras distintas de curar un mate

Si sos de los que prefieren el tradicional mate de madera o calabacín, tomá nota de estos tips para evitar la formación de hongos.

Por
Escrito en COCINA el

Existen muchas versiones para realizar la curación de un mate y todas suelen ser efectivas. Sin embargo, hay algunas que resultan mucho más prácticas y rápidas que otras, como las que presentamos a continuación.

1 - La curación con yerba usada: una de las más populares. Consiste en rellenar el mate con yerba que ya hayas usado y por 24 horas, agregarle agua caliente cada vez que se absorba. Pasado este tiempo, descartamos la yerba y con una cuchara o cuchillo, raspamos un poco las paredes del mate.

2 - La curación con azúcar quemada: una técnica muy antigua. Primero se lava el mate con agua caliente y luego, se le colocan dos o 3 cucharadas de azúcar antes de sumar un carbón tibio (se suelen usar los que quedan calientes después del asado). Se sacude bien el mate cuidando que todas las paredes se impregnen. Luego se enjuaga, se le pone yerba y agua tibia y se deja hasta el otro día.

3 - La curación con aceite: una técnica que se usa también para las ollas de barro y los wok. Básicamente, se untan las paredes del mate con aceite y se deja reposar por espacio de 12 horas. Pasado el tiempo, se lava con agua caliente y listo. 

Para qué curamos los mates

Uno de los motivos principales de este procedimiento es preservar el mate. Cuando los que son de madera o calabacín no cuentan con un curado previo a su uso, terminan agrietándose y comienzan a perder agua. Además, los poros del lado interno suelen estar abiertos y si no los curamos, generan una suerte de hongo que produce mal sabor.