Si sos fan de la palta seguramente te habrá pasado alguna vez que compraste una que estaba verde o quizás, demasiado pasada. Es que detectar el punto justo de este fruto no es tan simple como todos creen.
Hay quienes la eligen por el color de la piel o bien presionando un poco los extremos, pero esto no siempre resulta del todo efectivo. Esta vez, compartimos un truco vital para encontrar la palta perfecta.
¿Qué tenés que hacer? Simplemente, mirar el 'ombligo', es decir, el lugar donde se encontraba ubicado el cabito. Si todavía tiene un pedazo del mismo, vas a retirarlo con la uña y observar su color. Si el mismo es de color verde, significa que la palta aún no está lista para su consumo. Si es marrón, quiere decir que está pasada y sirve únicamente para cocinar o para hacer guacamole. Si en cambio el color es amarillo, la palta está en el punto ideal.