La focaccia es un tipo de pan plano y esponjoso originario de Italia, especialmente de la región de Liguria. Se elabora con una masa similar a la de la pizza, que incluye harina, agua, aceite de oliva, sal y levadura. La masa se deja crecer hasta obtener grandes burbujas en su interior, lo que le da su textura característica.
Hay versiones más tradicionales, en las que la masa se deja levar toda la noche. También se hacen focaccias con masa madre.
A diferencia de la pizza, la focaccia no lleva salsa de tomate ni queso sobre su superficie en su versión más clásica. El toque personal en esta receta típica lo ponen los ingredientes que se añaden en la cobertura, que suele llevar hierbas aromáticas como romero, tomillo y orégano, añade sal gruesa y un buen chorro de aceite de oliva.
También puede llevar otros ingredientes como cebolla, aceitunas, tomates, o incluso queso. El cocinero Donato De Santis tiene entre sus recetas personales una focaccia muy especial, con láminas de papa en la superficie, famosa en sus restaurantes.
Este tipo de pan muy versátil y se puede consumir a cualquier hora del día, ya sea como acompañamiento de comidas o sola como un snack.
Esta focaccia de tomates cherry es una de las recetas más prácticas y sabrosas.
Ingredientes para la cobertura:
20 tomates cherry cortados por la mitad
1 cucharadita de ajo en polvo
1 – 2 pellizcos de sal
2 – 3 cucharaditas de orégano seco
4 – 6 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
Ingredientes para la masa
300 g de agua tibia
25 g de levadura prensada fresca( a 10 de levadura seca)
1 cucharadita de azúcar
30 g de aceite de oliva virgen extra (y algo más para la bandeja)
350 g de harina 000
1 cucharadita de sal
Cómo se prepara:
En un bol mezclar todos los ingredientes de la cobertura y reservar.
En un bowl amplio, poner el agua tibia, la levadura, el azúcar y el aceite. Mezclar bien con una cuchara de madera.
Añadir las harinas y la sal y volver a mezclar muy bien, hasta que esté todo unido. Verter la masa (es una masa líquida) en un bowl Cubrir con film transparente. Dejar reposar 15-20 minutos.
Precalentar el horno a 220°C.
Verter la masa en la bandeja preparada y extenderla con la espátula, dándole forma de rectángulo (aprox. 25×30 cm). Distribuir los tomates por la superficie (no es necesario hundirlos en la masa) y regar con la marinada.
Hornear durante 20-25 minutos (220°C), hasta que la superficie esté algo dorada. ¡Retirar del horno, cortar en porciones y a disfrutar!