Ingredientes:
150 g de manteca de maní (o manteca de pistacho)
200 g de harina de almendras
Endulzante a gusto (eritritol, stevia, monk fruit, etc.)
100 g de chips de chocolate (puede ser amargo o sin azúcar)
1 cucharadita de aceite (de coco o el que prefieras)
Una pizca de sal (opcional, pero recomendada)
Preparación:
En un bowl, mezclá la manteca de maní o pistacho con el endulzante y la harina de almendras hasta formar una pasta espesa y homogénea.
Volcá la mezcla en un molde chico forrado con papel manteca o film y aplastá bien con una espátula para que quede compacta.
Cubrí con film y llevá al congelador por unos 30 minutos.
Mientras tanto, derretí los chips de chocolate con una cucharadita de aceite, mezclando bien hasta que quede una salsa lisa.
Retirá el molde del congelador y volcá el chocolate derretido por encima. Si querés, espolvoreá con una pizca de sal.
Volvé a llevar al congelador unos minutos más hasta que el chocolate endurezca.
Cortá en cuadraditos y ¡listo! A disfrutar de esta delicia sin culpa.
Tip: Guardalos en el freezer o la heladera para que se mantengan firmes. ¡Duran varios días… si no te los comen antes!