Ingredientes (rinde 6 a 8 unidades medianas):
3 papas medianas
2 cucharadas de manteca derretida (o aceite)
5 cucharadas colmadas de harina de maíz o "maicena"
1 pizca de sal
Queso rallado o en cubos (el que prefieras)
Aceite para freír
(Opcional: carne picada cocida o el relleno que te guste.
Preparación:
Cociná las papas con piel en agua hasta que estén bien tiernas. Luego colalas, dejá enfriar un poco y pelalas.
Pisá las papas en un bol hasta hacer un puré liso, sin grumos.
Agregá la manteca derretida, la maicena y una pizca de sal. Mezclá todo con las manos o una cuchara hasta obtener una masa suave y moldeable. Si la masa está muy blanda, podés agregar un poco más de fécula.
Tomá una porción de masa y, sobre una bolsa plástica o papel film ligeramente aceitado, aplastala con la mano hasta formar un disco del tamaño que desees.
Colocá un poco de queso (u otro relleno a elección) en el centro, y cerrá la masa como si fuera una empanada, presionando bien los bordes.
Repetí el proceso con el resto de la masa. Te podés ayudar con el plástico aceitado para que no se pegue ni se rompa.
Freí los tostados en abundante aceite caliente hasta que estén dorados de ambos lados. Retirá y colocá sobre papel absorbente.
Dejá enfriar unos minutos y serví. ¡El relleno queda cremoso y la corteza crocante!
Consejo extra:
También podés cocinarlos en sartén antiadherente con un poco de aceite si querés una versión más liviana. Y si querés llevarlos al horno, pincelalos con aceite y cocinalos a 200?°C hasta que estén dorados.