Al mismo tiempo en el que Thelma Fardín hacía pública su denuncia contra un reconocido actor -J.D.-, Página/12 publicó una extensa entrevista que la periodista feminista Luciana Peker le hizo a la actriz, donde ella cuenta en detalle la terrible situación que vivió en manos del actor.
A continuación, los pasajes más importantes de su testimonio:
"Se produce una situación de aprovechamiento. El me tira en la cama. Me corre el short. Me practica sexo oral. Yo le digo que no, le digo que no y su nombre. El sigue y me toca. Me mete los dedos. Y en ese momento le digo "Tus hijos tienen mi edad". Después descubro que es algo muy propio de las víctimas pensar en lo que el victimario no piensa. Y pensar que no puede estar pasando. Yo le seguía diciendo no. Es una frase muy contundente. Y él, sin embargo, se sube arriba mío y me penetra. En ese momento tocan la puerta para traerme la tarjeta. Eso logra que el salga de encima mío. Yo salgo corriendo a la puerta. Él me dice que no me vaya. Yo me meto en mi habitación a bañarme un rato largo. No entendía. Era una nena. Salía completamente de lo que podía manejar. Yo tuve que googlear cuantos años tenía en ese momento (45 años) porque para mí era un señor. Fin. Podía ser mi papá. Ni sabía cuántos años tenía."
"Baje a cenar y él me miraba. Yo no soportaba la mirada que me generaba mucha opresión. Enseguida empieza a llamarme por teléfono y me decía "Vení a mi habitación". Yo le decía que no de ninguna manera y cortaba. "Me decía por favor, vení". Y "Si no queres venir paseate por el pasillo", "Decime que tenes puesto". Yo colgué el teléfono a pesar que siempre me despertaba con el teléfono como despertador para asegurarme de no quedarme dormida. Me quede casi despierta toda la noche. Baje al lobby a la mañana y este tipo, que era el único adulto entre los actores, había otra gente pero de técnica, que a veces no estaban en el mismo lugar. Él decía "Yo era un pibe más". Y ese es el problema. No era un pibe más, era un señor. Pero le dice a dos chicos "No pude dormir, estuve toda la noche al palo". Y me mira como con una complicidad que no existía."
"Estaba con la valija y él se me acerca y me dice: "A vos nunca te va a faltar trabajo". Si yo accedía él me iba a garantizar trabajo y mi trabajo iba a estar supeditado a mis servicios sexuales y no a mi talento."
"A los dos meses me empezó a cosquillear toda la cara y no podía parar de llorar y llorar. Mi mamá me llevo a una guardia porque estaba muy asustada. En la guardia me reconocen y me dicen "No, esta chica está muy estresada por todo lo que vivió". Ellos se referían al éxito y yo estuve como dos meses tirada en el sillón de mi casa viendo películas, me deje, me abandoné, con jogging y remera, no me gustaba mi cuerpo. Yo rendía libre y no iba todos los días al colegio. Pero nos quedamos con ese diagnostico."