El 11 de marzo es una fecha que Luli Fernández jamás olvidará porque es el día en que se convirtió en mamá por primera vez. Desde entonces, sus días tomaron otro color y sus prioridades cambiaron por completo.
Hoy, a dos semanas de ese inolvidable momento, se anima a compartir su experiencia en las horas previas al nacimiento de Indalecio. "Hace dos semanas a esta hora, estaba entrando al quirófano para tenerlo a Indalecio. Había fisurado bolsa pero mi chiquitín estaba sentado, así que terminamos en cesárea.En ningún momento sentí miedo o ansiedad, es muy importante que el equipo médico que las acompañe sea de su entera confianza", comenzó.
"También conté con el apoyo incondicional de mi marido, que siempre tiene la palabra y la mirada justa para darme seguridad y tranquilidad. Fue todo tan rápido, me colocaron la anestesia y en menos de 15 minutos tenía a mi hijo encima. Es muy difícil encontrar palabras para explicar o compartir el sentimiento, de hecho creo que no existen".
Y cerró: "Desde mi experiencia les digo que pregunten todo! Que indaguen. Es SU momento y quienes las acompañen desde lo médico deben estar apoyándolas en cada instante del proceso.Es un derecho que todas tenemos. Respetarnos a nosotras y a nuestros bebes es una obligación de quienes van a tener la importante tarea de traerlos al mundo".