Cada vez falta menos para el casamiento de Jorge Rial y la nutricionista Romina Pereiro, que sin dudas será una de las bodas más importantes del 2019. Sin embargo, la futura esposa del conductor de Intrusos intenta no ponerse nerviosa por la exposición.
En diálogo con Pamela a la tarde, Romina planteó: "Estoy un poco nerviosa, desde hace unos días se me cerró el estómago, pero funciono igual, voy a laburar normalmente... pasa todo por dentro en mi caso. Estos días hubo muchas grabaciones, el tema del libro, tengo dos hijas chicas que consumen mucho tiempo y energía, así que me voy distrayendo con otras cosas".
En cuanto a la fiesta, la nutricionista explicó que con Rial están buscando mantener todo lo más íntimo posible. "Queremos que sea una fiesta para compartir con familia y amigos cercanos, la gente que queremos y está siempre con nosotros, que nos podamos divertir. Vamos a comer rico, vamos a bailar, nos vamos a divertir y después cada uno a su casa. Siempre pensamos no en un fiestón de 300 personas sino en algo más chico, para poder disfrutar y estar con todos los invitados, queríamos que fuera lo más íntimo posible, algo a lo que Jorge no está tan acostumbrado..., nos pareció que estaba bueno que fuera algo más chiquito", declaró la nutricionista.
A pesar de sus intentos de mantener el perfil bajo, la boda de Jorge Rial no va a dejar de ser un gran momento mediático, y Romina es consciente de que no va a poder evitar la exposición: "Se que es un casamiento que genera muchas cosas, que la gente lo conoce a Jorge hace un montón y es una persona muy pública. pero trato de no pensar tanto porque sino salgo corriendo".
Además, la nutricionista confesó que, luego de su primera separación, volver a casarse no estaba en sus planes. "Cuando te separás lo primero que decís es "nunca más me pongo en pareja, nunca más me caso", todas esas cosas las dije, una amiga las tiene grabadas en un video que va a salir en la fiesta, yo dije todo eso y después terminé haciendo todo. pero nunca me imaginé que con alguien tan público y de esta manera", declaró entre risas.
Con el conflicto entre Morena y Jorge ya finalizado, Romina tiene esperanzas de que la familia vuelva a compartir momentos felices. "Francesco va a ser el rey de la fiesta, ni nos imaginábamos, es muiy intensa esta familia y hacemos todo junto. Jorge está embobadísimo, feliz, lo mira, lo calma, lo vi muy canchero con el manejo de bebés a pesar de que pasaron como veinte años desde que sus hijas eran chiquitas. La verdad es que las cosas entre padres e hijos, cuando hay amor terminan pasando, en este caso todo tomó otra dimensión porque es todo muy público y fue duro, pero todo pasa", reflexionó.