TERRIBLE CONFESIÓN

Nazarena Vélez reflexionó sobre la presión que sentía para verse más flaca: “Para una publicidad me hicieron bajar cuatro kilos”

La actriz contó lo que debió vivir hace unos años cuando se dedicaba al modelaje y cómo su cuerpo se acostumbró a las anfetaminas.

Créditos: Revista Pronto
Por
Escrito en ESPECTÁCULOS el

Llega el verano y otra vez se pone en jaque la aceptación de la diversidad corporal, sobre todo, de las mujeres. Es por eso que Nazarena Vélez aprovechó para recordar cómo fue el duro proceso para aceptarse tal cual es y cómo comenzó su consumo de anfetaminas. “Me veía un poquito más gorda y sufría, me veía las estrías y sufría", había revelado en una nota televisiva.

Durante el programa Nosotros a la mañana, Nazarena confesó que nunca se creyó una bomba sexy y que sentía mucha “presión social” para ser lo más flaca posible. “Yo era una mina de Photoshop. Tenía estrías y lo que mostraba era mentira”, había expresado, tras publicar en las redes una imagen sin ningún tipo de filtro.

Por otro lado, en diálogo con a la tarde, la mediática detalló las técnicas que utilizaba para bajar de peso. “No soy de las mujeres que come y no engorda. Yo engordo. Entonces, tomaba anfetaminas, me volvía loca porque el cuerpo que me exigían para el tipo de trabajo que empecé a hacer, era un cuerpo flaquísimo”, recordó Nazarena Vélez.

Y contó cómo fue su primera experiencia con estos medicamentos. “En mi primera publicidad me hicieron bajar 3 o 4 kilos de un día para otro. Me dijieron ´sos divina, quedaste en esta publicidad pero tenés mucha cola´. Entonces yo que tenía menos autoestima y quería esos mil dólares, tomé diuréticos y laxantes y, lo hice”.

Además, confesó cómo se dio cuenta de que peligraba su salud y su vida. “Caí en esto cuando me estaba por morir. Dejé de tomar las anfetaminas porque me dio un ataque al corazón. Mucha gente me dice que no hable más de esto pero la toxicidad que tiene es comparable con la cocaína. Él médico me dijo que era como tomarme no sé cuántas líneas de cocaína. Tenía seca la boca, no tenía hambre y lograba el peso que yo quería”, finalizó.