Súper activa en redes sociales, Belu Lucius comparte en su cuenta de Instagram su cotidianidad y lo que va viviendo día a día no solo a nivel profesional sino también familiar. Pero un posteo en sus stories llamó la atención y causó preocupación entre sus casi 3 millones de seguidores. ¿Qué pasó? Lucius relató que su hijo menor, Benjamín (2), tuvo un problema de salud y tuvieron que ir a un centro medico.
"Chequeando el soplo que le encontraron a Benja. Todo muy bien gracias a Dios y a los médicos. Es algo que muchísimos niños tienen y que controlándolo uno se queda tranquilo. No dejen de ir al médico, de hacerse estudios, de aplicarse las vacunas de calendario, de cuidarse y estar atentos a la salud y a la de sus hijos", escribió la actual panelista de Cortá por Lozano y adjuntó una foto en la que se ve a "Canelón" -tal como ella apoda al menor de sus hijos-, en la guardia de un centro de salud.
Pronto se comunicó con la instagramer y actriz y ella ahondó, en exclusiva, sobre la afección que padece Benja, su niño menor, fruto de su matrimonio con el rugbier Javier Ortega Desio. "El soplo es algo muy común en los niños, que se puede detectar temprano o cuando en alguna consulta con el pediatra, antes de los 2 años, lo puede notar. Entonces, el pediatra te deriva con una cardióloga infantil, le hacen un electro y se trata. Nosotros justo le teníamos que hacer el prequirúrgico a Benja porque lo vamos a operar de los dos ojitos, nos vino bárbaro e hicimos dos por uno", comenzó relatando Belu.
Benjamín padece una afección que se llama "ojo vago", cuyo nombre técnico es 'ambliopía' y se trata del desarrollo anormal de uno de los ojos y por ende, la disminución de la capacidad visual del mismo. Los nervios que se ubican entre el globo ocular y el cerebro no se estimulan de forma adecuada y este favorece a uno sobre el otro. En medio de los estudios prequirúrgicos para operarse de los dos ojitos, al niño le detectaron un soplo.
"La médica nos dijo que nos quedemos tranquilos porque es algo muy común en los niños pero entiendo que aunque sean cosas muy comunes, igual hay que hablarlas porque los padres cuando vamos al médico y nos enteramos de estas cuestiones, todo se convierte en un shock. Es muy común lo del soplo y algunos niños conviven con el soplo toda su vida mientras que otros a los 11 años dejan de tenerlo. Y se les va solito, así como viene se va", contó Belu.
"Hay un 25 por ciento de niños que nacen con soplos y se les detecta más tarde. Conviven con eso hasta los 11 años y hay que controlarlo, sin asustarse. Nosotros se lo controlamos y todo esto en el marco de que Benja se va a operar de sus dos ojitos. Ya le hicimos el prequirúrgico, sacarle sangre en el laboratorio fue un drama porque a los niños no les gustan las agujas pero ya está y ahora nos van a dar fecha para la operación", cerró Lucius.