La vida lo puso en un lugar en el que jamás hubiera querido estar pero así y todo, Benjamín Vicuña no reniega. El tiempo le permitió procesar la pérdida de su hija Blanca y transformar todo ese dolor, en una energía capaz de seguir construyendo un camino en este mundo.
El actor chileno se convirtió en una suerte de referente para otros padres que han perdido a sus hijos ya que de algún modo, pudo salir adelante y volver a apostar a la felicidad. Sin querer hacerse cargo de esta responsabilidad, de vez en cuando acepta compartir sus propias vivencias para demostrar que es posible superar algo tan fuerte y doloroso. "En mi caso, el gran motor fueron mis otros hijos. También el amor que viene de arriba, yo creo en Dios y en la fe. Las dos fueron clave, dijo en una nota para el ciclo 'Mamás Felices'.
"Hay gente que me escribe por las redes sociales y siente la misma ansiedad y angustia que yo viví en algún momento, pensando si de esto se puede salir y la verdad es que sí, se puede volver a encontrar la felicidad. En algún momento, ese dolor infinito se apacigua".
Y luego, cerró: "Cada uno tiene el derecho de sentirlo y vivirlo como corresponde o como pueda. Trato de evadir este tema, ponerme como referente es muy pretencioso ya que se trata de algo complejo y muy profundo".
Este año se cumplieron 9 años de la muerte de Blanca Vicuña. La niña, que en ese momento tenía 6 años, hubiera celebrado los 15 este 2021.