Más allá de la imagen de mujer sin filtro, de carácter fuerte y humor ácido que supo construir en los medios, Yanina Latorre tiene una gran debilidad: sus hijos. Puertas adentro de la casa y pese a que ambos ya son grandes, se derrite con cada paso que dan. Hace poco, Dieguito terminó la escuela secundaria y ella no pudo contener las lágrimas de emoción por el cierre de esa etapa tan importante.
Pero aún con todas esas sensaciones de 'mamá babosa', sorprendió al contar en LAM que no es ella la mujer que más cela al menor de los Latorre. "Lola es terrible, lo cela un montón. Hace un tiempo estaba en casa con su mejor amiga, entré para darle una crema que usa para los granitos y la amiga me dice: 'dejá que se la pongo yo'. Se lo conté a Lola y se puso loca", contró entre risas.
El relato no quedó ahí. Para que la gente pudiera dimensionar el nivel de 'cuida' que tiene con su hermano, sumó otra anécdota reciente: "Me mandaron una foto del viaje de egresados de Dieguito con una mina... Lola está que se la llevan los demonios. No es foto hot pero la abraza y se nota que no como a una amiga...".
Sobre el futuro de su hijo, Yanina no pudo profundizar demasiado puesto que el tema es aún incierto. Hace unos años había empezado a entrenar y se perfilaba como jugador de fútbol pero la pandemia echó por tierra todos sus planes. La panelista se había mostrado bastante preocupada al respecto ya que lo veía completamente desganado y apático.