En agosto de este año Miguel Ángel Rodríguez anunció que ida a Uruguay. En ese momento se habló de un cambio de vida, de una mudanza definitiva. Sin embargo, casi al mismo tiempo que salía esa información, comentó que no era así, que no se mudaba a ninguna parte, y que solo se trataba de trabajo, que volvía pronto.
Más allá del motivo, Rodríguez sigue del otro lado del charco, disfrutando de la convivencia con a las pocas meses de comenzaran la relación sentimental con Marcela Gargano, se fueron a Montevideo y fue toda un experiencia: convivir y en otro país.
Sin embargo, todo salió de maravilla. La relación no deja de crecer y sumar capítulos de amor se multiplican. Al estar alejado de nuestra pantalla, se sabe poco y nada sobre su vida, más allá de lo que muestra en sus redes sociales, la felicidad que le imprime a cada cosa.
Sin embargo, el sábado 4 estuvo en Argentina, en el casamiento de Patricia Echegoyen y Rodrigo Prado del Río. Ante tal acontecimiento, no les podía fallar a sus amigos y regresó. Rodríguez fue uno de los que animó la fiesta y estuvo, aportando lo suyo.
Sin embargo, y ya saliendo de ese terreno, Miguel Ángel sorprendió con su look. Si bien se venía dejando la barba larga, tal vez para su nuevo proyecto laboral, no dejó de llamar la atención de los invitados lo prominente y crecida, que se completa con una cabellera rapada.
Canchero, con Marcela del Brazo, ingresó al salón con la frente en alto. Aquella fisonomía que se le conocía ya no es tal y ahora se muestra mucho más descontracturado.