Si hay algo que aprendió Pampita en todo el tiempo que lleva trabajando como modelo es a resolver los imprevistos. No importa la dificultad que se presente, ella siempre le busca la vuelta para salir airosa... como en este caso.
La modelo realizó una producción de fotos con un vestido al cuerpo que le quedaba pintado y mostraba su pequeña pancita en todo su esplendor. Claro que para poder ponérselo, requirió de toda la destreza y el apoyo de sus compañeros de trabajo.
Al momento de cerrarlo, el cierre de su espalda quedó trabado. No hubo manera de que lograran acomodarlo... incluso una de las asistentes hizo los movimientos más extraños sin éxito. Al final, Pampita se recostó sobre la cama y los alentó a seguir intentando. "No se rindan", les pedía.
Una de sus amigas estaba presente y registró el momento a pura risa, bromeando incluso con que el vestido le quedaba chico por la pancita. "No, no es por ella, es por este cierre que está roto", se quejaba la vestuarista mientras la modelo se reía.
Al final, lograron el cometido y Pampita lució impecable, como siempre.