TRAS LA MUERTE DE MARADONA

La frase de Dieguito Fernando que emocionó a Ojeda: "Como papá era el número uno, yo voy a ser el dos"

El hijo menor del Diez empezó clases de fútbol y le dejó una reflexión a su madre que la conmovió hasta las lágrimas.

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Verónica Ojeda estuvo invitada hoy a Los ángeles de la mañana para hablar sobre el fallecimiento de Diego Maradona. Pero, además, se animó a contar cómo está atravesando el duelo Dieguito Fernando, su único hijo con el Diez.

“Nunca lo llevé a fútbol, ahora es él el que me lo pide. Me dijo el otro día: ‘mamá, quiero jugar al fútbol, quiero ser futbolista, quiero jugar a la pelota’. Me dijo: ‘Como papá era el número uno, yo voy a ser el dos’. Eso me decía. Esas cosas que me dice Dieguito a mi me matan, me parten el alma. Empezó fútbol ahora, para que juegue con los amiguitos un rato, qué sé yo, para que se entretenga un poco”, contó Ojeda esta mañana en LAM. 

"Son cosas que me matan. La lucha es el día a día ahora con Dieguito. El otro día también, me preguntó ‘¿por qué los médicos no salvaron a papá?’. ¿Qué le puedo decir yo a Dieguito con esas preguntas? Son muy duras. Hablaba dos minutos y me ponía mal, me angustiaba toda la situación. No caí rápido, recién después de quince o veinte días, al mes es como que me agarró un bajón terrible y a eso se sumaron las preguntas de Dieguito”, agregó. 

En ese sentido, Ojeda explicó cómo intenta responder a las preguntas de Dieguito: "Él me empezó a decir que quería ver a su papá. Ahí caí en la realidad y en la terrible lucha que sigo teniendo. Todos los días me pregunta por su papá, y aunque yo le cuente una historia él sigue. Le digo que Diego está en el cielo, que mirando las estrellas busque la más grande porque ahí es donde está su papá y él lo cuida, pero eso como que ya no va más, quiere verlo a él”. Además, destacó que esta semana el niño comenzará las clases presenciales, a las que asiste con una maestra integradora, así que espera que esto lo ayude a tramitar el duelo.

Al final de la nota Ángel aprovechó para mandarle un saludo a Dieguito, que estaba sentado al lado de su mamá, y le preguntó si tenía ganas de volver a clases. "Si, para ver a mis compañeros", afirmó el nene, quien además aprovechó para mandarle un beso a su mejor amigo, Facundo.