Pasaron casi 5 años del escándalo que se dio en torno a la infidelidad de Leo Squarzon. Para colmo, en ese momento, Amalia Granata estaba embarazada lo cual hizo que todo se tornara más complicado. La pareja logró resolver sus diferencias y continuaron juntos, algo que no todos comprendieron y ellos, tampoco se preocuparon en aclarar. Hoy, a la distancia, la diputada lo recuerda como 'un hecho más' dentro de su relación de pareja.
"Fue una circunstancia de mierda. En ese momento, esperaba la verdad y me senté para hablarlo. Él me fue absolutamente sincero", recordó Granata en 'Debo decir'. Su historia volvió a salir a la luz a raíz del escándalo que está atravesando Horacio Cabak y que para la diputada, está lejos de ser igual a lo que ella vivió.
"A mi, Leo me miró a los ojos y me habló con la verdad. A partir de ahí, decidimos seguir construyendo la pareja y hoy tenemos una familia hermosa con proyectos a futuro. Jamás paso factura, en ningún momento", sentenció.
Luego, agregó: "Creo que todos somos seres humanos y tenemos deslices o necesidades. El amor no es estar todo el día con mariposas en la panza: es un trabajo en equipo. Si el otro tiene un desliz, te podés sentar a charlar, se comprende y se vuelve a construir sobre la base de ese amor”.