Recuperado de su adicción a las drogas, el Teto Medina decidió cambiar para siempre su vida profesional. Aunque sigue trabajando como conductor en El Nueve, decidió enfocarse de lleno en otra área: la recuperación de otros adictos.
En una entrevista con Canal 9 Salta, Medina contó que estudió para ser operador socioterapéutico en adicciones. "Trabajo en comunidades terapéuticas con chicos que tienen adicciones. Doy mi testimonio y por otro lado, les contamos sobre la problemática del tema. Les damos nuestros tips para superar el conflicto. Mi rol es organizar reuniones terapéuticas con todos los miembros de la comunidad y que aprendan a sacar el dolor y la angustia. Estoy muy entusiasmado con esto", explicó el conductor.
“En todo el país hay comunidades que ayudan a los chicos que sufren adicciones no sólo a las drogas, sino al juego, al alcohol y muchísimas más. Lo más importante de todo es que cuando uno está mal tiene que saber pedir ayuda. Hay que aprender a pedir ayuda y no esconderse -remarcó- Lo mismo que le digo a los chicos les digo a las familias: vos podés tener a alguien un año internado pero si cuando uno sale vuelve a la misma familia, va a volver a tener el mismo problema", agregó Medina, quien considera que su experiencia lo hace apto para ayudar a otros: “Yo lo viví en carne propia y a partir de esa vivencia me pregunté por qué no involucrarme más. Veo que hay chicos que sienten vergüenza por estar internados. Pero tienen que entender que esto es la salud. Como uno vivió el tema y lo conoce, sabe cómo encararlo. Muchas veces los padres descubren que tienen a un hijo adicto a algo y no saben qué hacer o a quién recurrir. La propia experiencia me ayuda a poder ayudar al otro”.
“No lo hago porque soy buen tipo ni mucho menos. Me sirve a mí en lo personal. Cuando un chico me dice que le salvé la vida, le aclaro que lo que hago es orientarlo para superar el problema de adicciones y le recomiendo ir a algún psicólogo, o sumarse a alguna comunidad”, admitió, y explicó: "Nosotros somos los de campo y vivimos el día a día del paciente. Después lo derivamos a un profesional de la psiquiatría. Nosotros trabajamos en conjunto con el médico”.
Tras haber estado internado por un cuadro depresivo, Medina considera que este es su mejor momento: "Siento una felicidad en el alma que no puedo describir. Cuando tengo 40 o 50 chicos con problemas de adicción les hablo, cuento mi experiencia, los escucho y les explico que esto se cura si uno aprende a sacarlo para afuera. Siempre se dice que uno tiene vidrio molido adentro cuando se angustia y no lo puede sacar. Lo importante es aprender a compartir y sobre todo en estos grupos donde no hay uno mejor o uno peor que el otro. Todos tienen problemas similares y yo aprendo mucho de ellos también”.
“Siempre hablo de esta cosa de andar lidiando por la vida, que es sacarte esos dolores que uno viene arrastrando, esa angustia. El aparentar, el no querer mostrar, el tener esta cosa escondida. Eso trae mucho dolor y crece tanto que uno ya no sabe cómo manejarlo. Es muy sanador cuando logran sacar esa angustia que tienen adentro. Lloran después de contarlo por primera vez. Por eso funciona tanto la terapia grupal. Es muy importante porque son pares que se animan. En donde se animó uno, se anima el otro. Cuando uno escucha todo lo que le pasó al otro enseguida se anima a hablar. Y eso lo sana. Está comprobado y es buenísimo. Está bueno ir por la vida sin mochila, sin cosas que te duelan. Eso se aprende compartiendo”, afirmó el conductor.
“A mí me sirvió mucho esto y me enamoré de la terapia en grupo. Ahí me decidí a estudiar esto y profundizar sobre el tema. Hay que enseñarle a la gente tiene que no hay que esconder las cosas. Hay que hablarlas. Un padre con un hijo. Una madre, una pareja, un amigo. Y dejar la vergüenza de lado. Siempre les digo a las familias o chicos que transitan por esto es que pidan ayuda. Esa es la mejor manera de resolver el conflicto. Solo no se puede. Hay que tener la bondad y humildad de acercarse a alguien y pedir esa ayuda”, agregó.
En ese sentido, el conductor contó que siempre busca felicitar a los jóvenes por haber dado el primer paso hacia la recuperación: "Eligieron el camino de la vida para recuperarse y estar bien. No son los pobrecitos que van y se internan, sino que son los campeones que eligieron recuperarse y que su familia deje de sufrir”.
Además, destacó el rol que tiene la familia en la recuperación: “En los tratamientos, cuando hay un adicto en la familia los que están alrededor son fundamentales. Yo grafico la adicción de esta manera-: Por ahí uno a los cinco años vive una angustia tremenda porque tiene una mala relación con los padres y esa angustia le queda. A los 20 empieza a tomar alcohol y se anestesia. Cree que la bebida le hace bien y no es así. Sino que tapa algo que le hizo mal y no superó. Hay que buscar el problema para resolverlo. Y cuando uno comparte con el otro llega a esa respuesta mucho mejor, porque tal vez al otro le pasó lo mismo que a uno. Es muy sanador
“Si todo esto que me pasó fue para llegar hasta acá, agradezco. No tengo broncas ni rencores. Soy un tipo feliz. Y si Dios eligió esto para mi vida lo transité. Hice las cosas bien y él me trajo hasta acá. Me perdoné, perdoné y ahora hay que ser feliz”, concluyó.
A finales de junio de 2019 Medina fue denunciado por violencia de género por su ex pareja, Mónica Fernández, con quien salió durante cinco años. Según afirmó ella en su denuncia, el 8 de febrero de ese año el conductor la amenazó a ella y a su hijo con un arma para que lo acompañasen a cambiar dos pistolas por droga.
Además, lo denunció por abuso sexual y agresiones, por un hecho que habría ocurrido en marzo en un hotel alojamiento. En 2012 la modelo Noelia Iglesias había realizado una denuncia similar en su contra, al contar que él la obligaba a consumir cocaína cuando mantenían relaciones sexuales. De esa causa, el conductor fue sobreseído.
En ese momento el abogado que representa a Fernández, Alejandro Cipolla, pidió la detención inmediata de Medina. Pero esto no ocurrió ya que a los pocos días el conductor fue internado por un cuadro de depresión mayor. Después de un mes y medio le dieron el alta en la clínica psiquiátrica, pero tuvo que continuar con un tratamiento domiciliario y, según su psiquiatra, no estaba apto para declarar en la Justicia.
En noviembre del año pasado la fiscalía consideró que no había pruebas suficientes y retiró las acusaciones contra Medina. En su momento, se dijo que el conductor podría realizar una contradenuncia ya que considera que perdió oportunidades laborales por los dichos de Fernández, pero por el momento el tema no prosiguió.