A Celina Rucci hace poco más de un año le confirmaron que tenía leucemia y desde entonces su vida cambió para siempre. Con la sabiduría y la fortaleza de haberle dado batalla a la enfermedad y de haber ganado la pelea, recordó cómo se enteró de esta triste noticia al visitar PH Podemos Hablar en Telefe. "Las personas sanas no saben valorar la vida. Tenes que estar enfermo para saber que todos tus problemas tienen solución", confió.
La ex vedette relató los primeros síntomas que, si bien en ese momento no le brindó importancia, fueron los indicios que marcaban que algo no estaba bien: "Me empecé a ver unos moretones. Yo soy grandota y torpe... Después me empezaron a sangrar las encías. Lo último fue que vino un ciclo menstrual muy abundante. Cuando estaba llegando a una consulta al médico me vi unos puntitos rojos. Yo me sentía perfecta, no estaba anémica, no estaba débil... por eso es una enfermedad difícil de diagnosticar".
Ese mismo día quedó internada. Quién le confirmó el diagnóstico fue Federico Girardi, el médico cirujano que le presentó Pamela David y con el que se fue a vivir a Nueva York. "Cuando ves a tu hombre, que es un genio de la medicina, que te dice que tenes leucemia y se larga a llorar... decís, 'chau, me voy'. Le pregunte si tenía tratamiento y si me quedaba poco tiempo de vida. Me dijo que había uno, que lo tome con calma para ver como reaccionaba mi cuerpo. Me interné. Tuve miedo", contó.
"Mi actitud fue siempre la misma. Recién lo conté cuando supe que el tratamiento estaba funcionando. Nunca dejé de reírme. Como dije en otras ocasiones, no voy a decir que eso te va a salvar, pero preguntarte 'por qué a mí' no te va a ayudar. Levantate de la cama y tu autoestima como puedas. Escucha música... no te quedes todo el día preguntándote", sentenció.