El nacimiento de su segundo bebé la había llenado de dudas, miedo y ansiedad, especialmente porque temía que la adaptación costara demasiado. Pero pocos días después de la llegada de Belisario, Juana Repetto siente que todo se está acomodando a la perfección.
Con sus 4 años y medio, Toribio entendió que la llegada de su hermanito iba a requerir de toda su colaboración. Así fue que lo recibió con mucho entusiasmo y se ocupó de demostrarle su amor desde el primer momento. Obviamente esto hizo que Juana se emocionara hasta las lágrimas y compartiera ese sentimiento con sus seguidores en las redes sociales.
Una de las cosas que más ansiedad le generaba a Juana era el hecho de que Toro no se sintiera desplazado con la llegada del nuevo bebé. En el embarazo, se había sentido un poco culpable porque no siempre sentía las mismas ganas de jugar con él pero al parecer, él captó lo que sucedía y lo tomó con naturalidad, más allá de algún berrinche lógico.
Otra que se muestra chocha con su rol es Reina Reech, que además de mimar a Toro el doble, también se ocupa de repartir mimos al recién nacido.