UN DOLOR QUE NO CIERRA

Zulma Faiad reveló por qué no pudo volver a tener un perro

La artista perdió a su perro de 18 años hace un tiempo y contó por qué aun no pudo volver a tener otro. "Igual no vivo sola", disparó. Enterate los detalles.

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Después de un año de quedarse en su casa cuidándose del coronavirus, Zulma Faiad volvió a la actividad y se presenta con la obra La chica del sombrero rosa, de jueves a domingos a las 20 en el Teatro La Casona, junto a María Rosa Fugazot, Alberto Martín, Adriana Salgueiro y gran elenco. La prestigiosa actriz conversó con Pronto para la edición de agosto de la revista digital y habló de todo. “¿Cómo vivo este regreso al teatro? Siempre con alegría. No solo mi regreso sino el de mis compañeros y todos los artistas. Es lo que necesitamos para que la vida sea feliz: subir al escenario es terapéutico, es lo que nos gusta hacer, es comunicarnos con el otro y eso ya es un acto de amor de por sí", confió.

Siempre agradecida con el público, agregó: "Y no nos olvidemos que si el público no está ahí, no tiene sentido que nosotros estemos allí. Siempre necesitamos al socio incondicional que es el público”. En medio de la entrevista (que se puede leer completa haciendo click aquí), Faiad contó cómo sobrellevó gran parte de la pandemia: "Al principio, sentí que estar encerrados era como un arresto domiciliario porque no estaba eligiendo no salir porque yo no quería. Sino para protegerme y proteger al otro. Esto se hizo muy largo y me acostumbré a este ritmo de la soledad. Tal es así que el otro día tuve que ir al centro y me agarró un estado panicoso: los autos, la gente, en bullicio… Ya no me gusta eso y me confirma que a mí me gusta la soledad".

Si bien reconoció que le gusta la soledad, la actriz confió que no vive sola. "Efectivamente no vivo sola sino con la gata de mi hija, que me la dejó para que se la cuide. Se llama Titita. Mi perro falleció hace 5 años y lo tuve 18 al lado mío. Era un pastor húngaro que me regaló Miguel Romano. Hace 5 años murió y no pude tener otro perro. Todavía me cuesta y lo extraño mucho. Siempre tuve perros grandes: doberman y del estilo, nunca perros chiquitos. Me gusta el perro mediano o grande", sostuvo.

¿Si volvería a tener otro perro? Ella lo contó así: "Sí, seguramente voy a hacerlo. Siempre y cuando yo esté para cuidarlo porque hay cosas que no delego, como las cuestiones que tienen que ver con el amor. Eso de ´cuidámelo que ahora vengo´, conmigo no va".