Es uno de los periodistas especializados en policiales más conocidos y queridos del país. Dueño de una vasta trayectoria en televisión, radio y medios gráficos, Paulo Kablan actualmente le pone su impronta a Flor de equipo, el magazine de las mañanas de Telefe que conduce Florencia Peña y donde Kablan no solo informa sobre la actualidad policial sino que juega otros roles y pases de comedia junto con Campi, Marcelo Polino y el grupo que lidera las mañanas de la televisión abierta.
Pero de un tiempo a esta parte, Paulo ha ido cambiando su aspecto físico y su notoria transformación no solo llamó la atención de sus pares sino también del público que lo mira tanto en Flor de equipo como en los noticieros de C5N y en El expediente, su programa que sale los viernes a la noche por C5N. La pregunta es: ¿cómo hizo para bajar de peso y verse saludable?
Pronto se contactó con Kablan, quien reveló: "En total, bajé 24 kilos y hasta yo estoy sorprendido". El comienzo de su cambio arrancó cuando decidió dejar un mal hábito: el cigarrillo. "Dejé de fumar hace dos años y medio y con la ansiedad, subí 24 kilos. Me sentía pesado, cansado y supe que tenía que hacer algo. Me puse las pilas y desde octubre del año pasado hasta hoy, llevo bajados los 24 kilos que había subido por la ansiedad de no fumar", relató el periodista.
¿Si existen las fórmulas mágicas? No, en absoluto. Paulo lo cuenta así: "Fue fundamental mentalizarme en que quería cambiar y accionar. Hice una dieta estricta, siempre asesorado y acompañado por un equipo de profesionales de la salud. Me cuido mucho en las comidas, tengo asistencia médica y estoy haciendo actividad física".
"Ahora para mantenerme, que es lo más difícil de todo esto, sé que tengo que entrenar y hacer actividad deportiva, así que en eso estoy. Estoy saliendo a andar en bicicleta, camino mucho con mi mujer, La Garibotti, y como con suma cautela. Me cuido en las comidas e ingiero lo que me indican los nutricionistas", continuó con su relato. "Ojo: no es fácil y lleva mucho sacrificio. Fueron muchos meses de cuidarme un montón y hoy solo tengo que mantenerme", añadió.
¿Cómo suplió el vicio del cigarrillo? Comiendo. "Cuando dejé de fumar, no podía parar de comer. Por eso subí 24 kilos. Hoy, que estoy mejor y la ansiedad se me fue, me sigo cuidando y nunca más volví a fumar. La ansiedad se me fue pero es una lucha diaria porque cada dos semanas, me dan ganas de fumar. Siento que me falta algo y me doy cuenta de que es la abstinencia al pucho. Es una lucha diaria y la sensación es que ayer dejé de fumar. Como laburo mucho, con el trabajo también estoy muy entretenido y es fundamental tener la cabeza ocupada", cerró.