Todo comenzó después de que Rodrigo Lussich visitara el piso de Ph, Podemos Hablar y afrontara la pregunta "cara a cara" que le hizo Graciela Alfano, otra de las invitadas al ciclo.
“¿Te arrepentís de haber dicho o revelado algo en tu rol de periodista que podría haber causado sufrimiento en otros?”, le consultó sin filtros la ex vedette.
Haciendo un mes culpa, Lussich aseguró: “Sí, me arrepiento muchas veces. Creo que para bien y para mal, mi virtud es también mi cruz a veces, soy un tipo muy frontal y juego con la impronta, y con esa impronta se me va la mano quinientas veces".
Luego de esto, el conductor de Intrusos, detalló: "Cuando Nico Vázquez, hace muchos años, se había separado en ese momento de su primera relación, de Mercedes Funes, yo hablé, y ni siquiera te puedo precisar las palabras que dije. Pero después me vio en un estacionamiento y me quiso fajar".
“Y de verdad me quería fajar, porque lo había lastimado, seguramente. Y ahí intervino mi compañero del alma, Adri (Pallares), que había ido conmigo a ver una obra, y me salvó la situación”, sumó recordando sus inicios como panelista.
Finalmente, Rodrigo aseguró que este enojo quedó en el pasado y que hoy se lleva bien con Vázquez: “Años después le pedí disculpas, sin que él sepa, en un programa en el que trabajaba. Y después, me llamó, lo hablamos, me perdonó, después terminamos yendo a comer con su mujer, Gimena (Accardi)”.
“No digo que nos hicimos amigos, pero hemos salido de farra con barra de amigos, y hemos podido sublimar. (…) Cuando hablamos de la vida de los otros, seguramente podemos hacer daño, y pido disculpas por eso”, cerró Lussich a modo de reflexión.