Luego de haberse vacunado contra el coronavirus, Susana Giménez se contagió y pasó varios días internada en el Sanatorio Cantegril de Punta del Este, Uruguay. Estuvo 15 días internada y, según sus palabras, no la pasó bien.
Sin ir más lejos, en la entrevista que le dio a Telefe Noticias, hace una semana, contó que tuvo miedo de morirse y de que la intubaran: “‘Si me tienen que intubar, déjenme ir porque no lo voy a soportar’, les dije. No tenía ganas de morirme, pero el terror que te agarra, estar sola en tu cuarto... Lloraba por todo”.
Acto seguido se refirió a la medicación que le dieron y el tema empezó a viralizarse. “En el Cantegril me dieron todo lo mejor que me podían dar y me salvaron en realidad dos inyecciones muy impresionantes, fuertes y caras que consiguieron en el sanatorio y me las pusieron”.
Fue tal lo que se generó, que la diva acudió a sus redes sociales para hablar del tema. Como mucha gente le escribió por el tema, decidió hacerlo público. “Para todos los que me preguntaron cuál es la ampolla que me dieron cuando tenía COVID que me hizo tanto bien, se llama Tocilizumab”, empezó tanto en Instagram como en Twitter.
“Por favor, tengan en cuenta que no se puede suministrar sin prescripción médica y es recomendable solo para ciertos casos e instancias de la COVID-19”, finalizó el mensaje.
Se trata de un remedio que se empezó a utilizar primero en el Reino Unido y que se utiliza para otras enfermedades. En Uruguay fue aprobado en junio, justo cuando se contagió Susana y por eso se lo pudieron suminstrar. Si bien es un fármaco conocido, porque se usa para otras enfermedades, no estaba aprobado para el tratamiento del COVID-19 porque tiene varias contraindicaciones.