Lejos quedó la mediática boda de Reinaldo Wabeke con Adelfa Volpes, mujer que le llevaba sesenta años, en 2007. Quince años después de este hecho, la vida de viudo cambió rotundamente: se encuentra preso en la ciudad de Rosario por tráfico de estupefacientes y atraviesa una profunda depresión.
Queriendo saber cómo se encontraba hoy Reinaldo, el periodista Juan Etchegoyen se comunicó con Lautaro Reyes, uno de sus mejores amigos. “Él cumplió dos años detenido a principios de octubre, tenía dos causas. Una prescribió y la otra sigue su curso y ahora está a punto de que le otorguen las salidas transitorias. Va a tener que seguir yendo a la cárcel, tiene que dar un domicilio fijo y quedarse cerca de la zona del penal. Él perdió todo, cobra la pensión de Adelfa pero le sacaron todo”.
“Yo me comunico con los abogados y sus allegados pero no puedo comunicarme directamente con él. Reinaldo tuvo un intento de suicidio en la cárcel, estuvo muy bajoneado y está con psicólogo allí. Lo han quemado con agua hirviendo. Lo que me sorprendió de él es que, dentro de todo, fue fuerte y se mantuvo arriba. Ahora hizo un par de cursos, se hizo evangelista, entró en esa religión, y está limpiando las oficinas. Está trabajando de personal doméstico”, continuó.
Finalmente, recordando el momento en que su amigo conoció a Adelfa, Reyes cerró: “Él nunca necesitó trabajar y ahora está haciendo eso. Tiene muchas horas de oseo en la cárcel y está en un penal más exclusivo, está con policías y gente más VIP en el pabellón donde está él. Lo visitan familiares, más precisamente su pareja Emanuel. Es la visita que tiene asiduamente, creo que todos los lunes lo visita”.