Argentina le ganó a México por 2 a 0 y el alivio que generó este triunfo para seguir soñando se vio en las tribunas. El paneo de las cámaras sumado a lo que se pudo ver en la redes sociales, dejó en claro la euforia de todos. Incluso, hasta se lo vio a Marcelo Tinelli descontrolado, sacándose la camiseta, parado en su butaca sacando afuera emociones contenidas.
Marcelo llegó a Doha para la primera fecha todo su grupo (su hijo Lolo, El Tirri, Chato Prada, Fede Hoppe, Hernán De Laurente y Lautaro Mauro), estuvo en la derrota contra Arabia Saudita y él también se sacó una espina. Cronológicamente, ingreso sereno al estadio, se ubicó en su butaca con Lolo y compartió esa imagen.
“Un regalo del cielo, un regalo de Dios, poder ver el Mundial de Qatar con mi amado Lolito”, fue el mensaje que compartió. Luego de eso, mostró las tribunas, como se estaban viendo los momentos previos. Pero empezó el encuentro y los nervios lógicos. Ni siquiera el calor lo perjudicó, ni lo que vivió por culpa del Pollo Álvarez.
Sin embargo, Lionel Messi frotó su zurda mágica, puso el 1 a 0 parcial y Marcelo dejó de lado la compostura. No le importó nada, se sacó la camiseta, y gritó el gol con los brazos en alto, mostrando todos sus tatuajes al mundo. “Gracias Argentina por esta noche maravillosa en Qatar”, comentó.
En la postal se pudo ver a parte de los que fueron con él también recuperándose una vez que bajó la espuma. El Tirri sentado unas butacas atrás de él, y otras más adelante a Fede Hoppe, parado, como buscando a alguien con la mirada. Por supuesto, cada uno lo vivió a su manera, pero todos felices.