Se viene hablando hace días sobre la situación que atraviesa Karina La Princesita. Ante su silencio, la bola de nieve que suelen construir los rumores se agigantó a tal punto que se llegó a decir, por ejemplo, que la cantante tropical está inmersa en un profundo cuadro depresivo como consecuencia de un desengaño sentimental.
Concretamente, una infidelidad de su novio, Nicolás Furman, de quien, se añadía, había tomado la determinación de separarse. Sin embargo, en las últimas horas la propia ex jurado de Showmatch desmintió que su presente tenga relación directa con un tema de pareja, pero reconoció que transita días complicados y que su estado de ánimo está lejos de ser el que desea.
"Estoy pasando un momento muy difícil por cosas que arrastro muy tristes desde hace tiempo. Las cuales pensé que no, pero sí me habían afectado mucho. Y nada tiene que ver con una infidelidad ni con un tema de pareja. Respeten un poco antes de inventar historias. Gracias" escribió la artista en twitter, donde, puede advertirse, también embiste contra quienes informan acerca de su actualidad sin chequear antes con la fuente.
Previsiblemente, la cantante recibió rápidamente numerosos mensajes de apoyo y, si bien intuimos que habrán sido recibidos con beneplácito, la solista se despidió con una frase todavía más intrigante: "A la salud mental hay que respetarla". La pregunta de sus fans se cae de madura: ¿Qué le pasa a la Princesita?