Para muchos especialistas, la primera infancia es la etapa más propicia para inculcar la cultura del deporte. Paralelamente al jardín, se recomienda que los niños vayan aprendiendo distintas actividades físicas para evitar el sedentarismo y generar hábitos e independencia. Así, evidentemente, también lo entiende Luciana Salazar, quien, se sabe, es mamá de Matilda. La niña que nació por subrogación de vientre en diciembre de 2017 y que en la actualidad va camino a cumplir 5 años.
Desde que llegó al mundo, el interrogante sobre el donante de esperma siempre sobrevoló, pues la modelo y conductora jamás quiso brindar la información. Las suspicacias y las conjeturas apuntaron mayormente a Martín Redrado, último novio estable y conviviente, inclusive, de Luciana. Sin embargo, al margen de la buena relación que el economista mantuvo -hasta los últimos días- con su ex, quien por el contrario afirmó recientemente que "Martín nos odia a mi y a Matilda", jamás se mostraron documentos para confirmarlo.
Por lo pronto, Luciana sigue adelante con la crianza que planificó: sola. Secunda a Matilda en cada paso que da en la vida pero ya notó que ha llegado la hora de implementar un primer cambio. Un quiebre que permita matar dos pájaros de un tiro: la realización de una práctica deportiva y, a la vez, un primer contacto estrecho de su hija con otros chicos de su edad, fomentando la socialización. La rubia procedió en consecuencia y la inscribió en el club Atlético River Plate en gimnasia artística. Obviamente, Luciana la acompañó a su primera clase y documentó con fotos cada momento, material gráfico que seguramente atesorará como toda mamá. Y por supuesto, subió las imágenes su cuenta de instagram, tanto del aprendizaje como del carnet de la institución millonaria. A la que la asoció, con el fin de que transite su primera niñez sumando apego al deporte y conociendo nuevos amigos.