En las últimas semanas, medios chilenos dieron cuenta de que la relación de la China Suárez con Isabel Luco Morandé, la mamá de Benjamín Vicuña, no era la mejor. Todo vino a colación de lo que fue la primera visita de Ana Sulichin, la nueva pareja del actor, a sus familiares en Chile. Fue la presentación oficial.
Se sabe que doña Isabel tiene en lo más alto a Pampita. La subió a un pedestal y sacarle de ahí no será sencillo. Por lo pronto, Suárez no solo que no pudo, sino que dejó una muy mala impresión. La gota que rebalsó el vaso fue la casona que compraron antes de separarse. Ellos se habían distanciado, la mudanza fue parte del volver a empezar, pero apenas se firmó se distanciaron por pedido de la actriz. La propiedad estaría a nombre de ella.
En el mismo plano, desde el otro lado de la cordillera remarcan que Luco Morandé puso a tres abogados a trabajar en el tema, quiere recuperar esa casa que pagó Benjamín, con un porcentaje que puso ella, a través de acciones de la familia que fueron vendidas.
Con todo esto sobrevolando, la China enfrentó a la prensa en la avant premier de Competencia oficial, la película que protagonizan Oscar Martínez, Penélope Cruz y Antonio Banderas. Ante la consulta de Socios del espectáculo, sobre si tenía algo para decir, no se la jugó y, claramente incómoda, soltó: “Nada de nada”.
Vale aclarar que días atrás, el actor chile se refirió a esta situación que da vueltas y lo desmintió ante PrimiciasYa. “Yo vivo solo desde los 16 años, tengo un vínculo con ella maravilloso, de respeto, de cariño. Ella no tiene ningún tipo de injerencia sobre mi vida, ni mis decisiones, ni mis hijos, ni mis ex”.