LO CONFIRMÓ CARLOS ROTTEMBERG

Dolor en el mundo del espectáculo: murió Enrique Pinti a los 82 años

Estaba internado desde el 5 de marzo en el Sanatorio Otamendi

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“Elegimos despedir a Enrique Pinti -enorme referente de esta Casa Teatral- recordando su última marquesina.
Finalmente su salud no le permitió concretar el “Muy pronto” anunciado. Sin dudas Enrique protagoniza hoy uno de los momentos tristes de la historia del teatro argentino”, así lo despedía  un mensaje en las redes sociales del Multiteatro Comafi donde el actor y humorista tenía pensado presentar su próximo espectáculo. Su salud le impidió cumplir con lo que era su gran pasión: estar arriba de un escenario.

 

Para Pinti la pandemia fue un cimbronazo, en especial durante la etapa de encierro en la que tuvo que abandonar sus rutinas de salir a la noche, ir al teatro, cenar con amigos, en Edelweiiss, preferentemente. Esa situación lo bajoneó. A eso se sumó un cuadro de diabetes que se fue complicando. El 5 de marzo fue internado en el Otamendi y sin que hubiera muchas precisiones sobre su situación, se sabía que estaba grave. En septiembre de 2019 le había reconocido a La Nación que “el cuerpo me ha abandonado, la cabeza no”. Y contó que debido a la diabetes, que se le desató de golpe en 2015, y los problemas circulatorios en sus piernas estaba obligado a trabajar sentado. Murió este 27 de marzo a las 3.40 de la madrugada según informó Pablo Montagna.
 

Estrella del café concert, brillante monologuista, dueño de una verborragia descomunal, podía estar dos horas en un escenario satirizando sobre la realidad nacional e internacional. Salsa criolla fue una de sus obras emblemáticas que durante más de diez años presentó a sala llena en el Liceo. Otros sus éxitos fueron: Historias recogidas (1973 a 1975), Historias recogidas II (1978 a 1979), El show de Enrique Pinti (1980 a 1981), Vote Pinti(1983), Pinti y aparte(1992), El infierno de Pinti (1997), Pericon.com.ar (2000), Candombe nacional(2002 a 2004) y Antes de que me olvide(2010).

 


Siempre soñó con poder actuar y durante mucho tiempo se quejó de que lo encasillaban y no lo llamaban para hacer cine o ficciones en televisión. Había trabajado en películas como Esperando a la carroza pero su anhelo era tener un papel dramático. Finalmente pudo darse el gusto en la película Perdido por perdido con Ricardo Darín y Carolina Papaleo. Además, hizo un capítulo de la miniserie Tiempo final. 

Para Mirtha Legrand, que seguramente habrá recibido con mucha tristeza la noticia de su muerte, Pinti era una cábala: siempre lo sentaba a su mesa en el primer programa de cada temporada de los almuerzos.