Esta semana se reavivó una vieja interna del ciclo Intrusos que puso a Débora D´Amato en el banquillo de los acusados. Marcela Tauro contó que era ella la que filtraba información del chat paralelo que tenían en Intrusos los panelistas a Jorge Rial, el conductor que no formaba parte del mismo. Yanina Latorre se sumó a la polémica y dijo ese 'lleva y trae' había sido la razón por la que terminó su amistad con ella y agregó que Marina Calabró también estaba segura de la traición de D´Amato.
Pero 'la acusada' se defendió y negó a muerte todas las acusaciones. Y como para dejar en claro que siempre tuvo muy buena onda con todos sus compañeros de trabajo, contó un par de situaciones muy puntuales que a ella la dejaron en paz. "El día que me quedé sin laburo, todos mis compañeros me llamaron. Los que estaban delante de cámara y los que estaban detrás también. Eso para mí fue muy importante, porque me sentí muy valorada":
D´Amato reconoce que haberse quedado afuera de Intrusos la angustió mucho ya que no sabía qué iba a pasar con su futuro laboral y para colmo, tenía a su hija chiquita a cargo. Fue ahí que sacó a la luz, el enorme gesto que tuvo con ella Marina Calabró. "Yo soy mamá soltera y no sabía qué iba a pasar. Me llamó Marina y me ofreció pagar el año completo de mi hija. Me dijo que no se lo iba a decir a nadie, que a ella no le sobraba el dinero pero que podía contar con eso".
"Yo se lo agradecí infinitamente y le dije que tenía una familia que podía bancarme, pero le voy a estar agradecida siempre por eso", agregó como para dejar en claro el cariño que existía con el resto del equipo.