ENTREVISTA

Nadia Di Cello, ex Chiquititas: "Volví al teatro y ahora mi sueño es trabajar otra vez en televisión"

La actriz que se ganó el amor del público como la simpática Nadia en Chiquititas está a punto de estrenar la obra Quién se queda con mamá, en Teatro Border. Cómo palpita el debut y qué proyecta para su carrera.

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Seis años tenía cuando llegó a la televisión y de la noche a la mañana su vida cambió para siempre. Nadia Di Cello (33) se hizo conocida por Chiquititas, donde le dio vida a la simpatiquísima Nadia, y luego trabajó en otros programas como Rebelde Way, Rincón de Luz y El refugio. En la adolescencia dio un paso al costado y se alejó del medio pero en 2015 volvió al ruedo con una obra de teatro y desde entonces no paró de trabajar sobre las tablas.

Actualmente, está próxima a debutar con Federico Barón con la obra Quién se queda con mamá, en el Teatro Border (Godoy Cruz 1838), comedia que debutará el  5 de mayo y que se presentará solo los jueves a las 22.30 por ocho funciones. "Quizás podemos extender la temporada si nos va bien y luego la idea es salir de gira por la Argentina y Uruguay", cuenta Nadia a Pronto.

El espectáculo cuenta la historia de dos hermanos: uno súper exitoso en los negocios y muy adinerado a su corta edad y su hermana, que decidió llevar una vida más bohemia y no tan superficial. Diferentes entre sí, se encuentran por causa mayor en una casa fúnebre para retirar las cenizas de su madre y allí se desencadenan situaciones impensadas, con la empleada del lugar que no para de darles malas noticias.

"Este proyecto me llegó en la pandemia pero no se podía hacer, lo fuimos posponiendo y luego me convocó Nazarena Vélez para actuar en la obra Trepadores. Entonces, dejamos en stand by esta obra y el productor de Quién se queda con mamá me vino a ver al teatro y ahí reparó en Fede Barón. Le gustó nuestra dupla y al tiempo empezamos con los ensayos", relata la actriz.

"Es una comedia muy divertida, que a su vez te deja reflexionando y muestra que ninguna familia es perfecta. Además de nosotros dos, está la Tía Miguel, que es una actriz trans que hace de empleada de la casa funeraria y le mete humor a la obra. Vamos todos los jueves a las 22.30 y hay regalitos sorpresa para el público", anticipó la ex Chiquititas.

Por otro parte, Nadia tiene un proyecto personal que comenzó a preparar hace un tiempo y que verá la luz en junio. "No puedo contar mucho pero tiene que ver con mi carrera y con tantos años de amor con el público. La idea es llevarlo a Israel también, donde estuve hace poco y me recibieron con los brazos abiertos", contó.

Di Cello llevó dos espectáculos distintos a Israel, donde es famosa por su trabajo en Chiquititas y siempre que viaja la reciben con mucho amor. "No puedo creer que hayan pasado más de 20 años de Chiquititas y la gente todavía me hable del programa y me cante las canciones", agrega.

-¿Cómo llegaste al casting de Chiquititas?

-Me presenté porque fui a acompañar a mi hermana pero era tan inquieta que me crucé con Alberto Fernández de Rosa, me vio pizpireta, le hice un baile y me terminaron tomando un casting a mí. Tenía seis años, no sabía leer y recuerdo que les bailé el show de de Xuxa. Tuve que pasar 8 castings hasta que finalmente entré y la vida me cambió para siempre.

-¿Imaginabas lo que se venía?

-No, ni en sueños. Fueron muchos años de hacer tele, teatros Gran Rex llenos, giras, viajes e incluso me tocaba a mí abrir el show del Rex. Una locura todo. Fue hermoso pero igual le puse mucho trabajo y dedicación. Al comienzo lo veía como un juego y después entendí que era mi trabajo y mi profesión. Fue mucho sacrificio para poder perdurar.

-¿Por qué en un momento te corriste?

-Porque estaba en la adolescencia, en mi casa se vivía una situación complicada, mis papás se estaban separando y el divorcio fue muy conflictivo. Sufrí mucho, estaba re triste y cuando iba a grabar tenía que estar bien y que no se notara mi angustia, lo cual también me generaba una presión por miedo a perder el trabajo.

-¿Te costó que se terminara el boom de Chiquititas?

-Sí, mucho y también lo sufrí. Estaba confundida, no sabía qué quería hacer, sentía que quería empezar a vivir mi vida más allá de estar todo el día adentro de un canal de televisión y me alejé por un tiempo. Cuando me di cuenta de que era feliz con otros trabajos y quise volver a actuar, me costó muchísimo. Se me complicó, golpeé muchas puertas y todos me decían que si surgía algo me iban a llamar. No fue fácil y eso me fue frustrando.

-¿Quién te ayudó a volver?

-Jimena Piccolo, quien fue mi compañera en Chiquititas y en 2015 me propuso hacer teatro. Me dio una mano enorme, volví a actuar y desde entonces no paré. No olvido el gesto que tuvo Jime y la mano que me tendió cuando más lo necesitaba.

-¿Y la tele?

-Tengo muchísimas ganas de volver a trabajar en televisión, ya sea en una novela, una tira, unitario o sino en algún programa como Masterchef Celebrity. No le tengo miedo al reality pero prefiero algo como Masterchef, donde no hay escándalos de por medio. En El hotel de los famosos no podría entrar ni en sueños porque ahí se pelean todos con todos y eso no es lo que quiero para mí.

Por Nicolás Peralta