Hace 10 años, cuando su vida pendía de un hilo, Sonsoles Rey fue la protagonista de un milagro. En ese momento, cuando el trasplante era el único camino, apareció Sandra Mihanovich y le donó el órgano que tanto necesitaba. La joven es la ahijada e hija su pareja, por lo que apenas los estudios dieron esa compatibilidad, la artista no lo pensó dos veces.
Ya recuperada, Sonsones contó cómo fue esa parte, en la que hubo una investigación previa para acreditar la familiaridad, ya que de otra manera no se podía. “Mi diálisis fue terrible. Llegué a pesar 44 kilos y eso aceleró la decisión, pero no me la hicieron fácil. Investigaron todo: fotos, vínculo, hubo psicólogos, médicos forenses. A Sandra le preguntaron si era consciente que se iba a quedar sin un órgano y ella respondió: ‘lo que vos recibís, es más de lo que das’”.
Luego de eso, ella habló de su felicidad por volver a jugar con su hijo y remarcó que estaba curada por completo. Le siguieron haciendo estudios hasta que en un momento le confirmaron que ya no había rastros de la enfermedad: “Estoy feliz de la vida, me siento bien”.
Pero en las últimas horas Rey acudió a sus redes sociales para contar que no está atravesando su mejor período de salud. Surgieron complicaciones y de esto habló en Instagram. “No estoy pasando un buen momento con mi salud de nuevo...lo cuento porque muchos me preguntan qué me pasa. Gracias siempre por sus mensajes”.
A continuación, a través de las historias, remarcó: “Voy a darlo todo como siempre, pero se me viene una complicada, jamás abandonaré la batalla. Gracias, gracias, gracias”. “Pude 1 vez, pude 2 veces, voy a poder 3”, comentó, haciendo referencia a que el primer trasplante fue en 2001, luego llegó el segundo en 2011 y ahora, que necesita volver a pasar por lo mismo.
A raíz de esto, los mensajes preguntándole y dándole aliento se multiplicaron. Por esto, decidió acudir una vez más a sus redes para dar más detalles: “Sigo contando porque no puedo contestar todos los mensajes. Hace dos años que vengo peleándola. No sabemos por qué este riñoncito que tanto amo no quiere andar más”.
Por otro lado, utilizando fotos veraniegas, contó que hoy empezó a dar otro paso: “Yo soy esto que ven en esta foto! ¡Así que voy a poder! Hoy me ponen un catéter en el cuello (qué lindo) para poder ir a diálisis y prepararme para un nuevo trasplante. Tengo que poner de nuevo el cuerpo, pero todo lo que sea oscuro lo llenaré de luz porque así soy. Me gusta la vida y, cuando termine esto, fiestón”.