Poco tiempo después de que estallara en los medios el Wandagate y la China Suárez volviera a ser castigada y criticada por una buena parte de la sociedad, la actriz prometió no quedarse de brazos cruzados. Aseguró que pensaba 'tomar medidas legales' contra todos los que la había atacado y los que osaran volver a poner en duda su honestidad... y cumplió.
Este martes en LAM, Fernanda Iglesias contó que recibió una carta documento de la actriz por un comentario que hizo en el programa. Si bien fue algo que dijo 'al pasar', la China no lo dejó pasar y le pidió a su abogado que se ocupara del asunto.
"Yo dije que tenía un cuento de una persona que alguna vez le había alquilado la casa a la China Suárez y que no la habría dejado en buenas condiciones.... dije que temía por la mujer que le había alquilado ahora en el Uruguay", detalló Iglesias.
Y explicó: "No tiene ningún sentido la carta porque ella dice que esto es 'violencia de género'. Yo le explico que me baso en una fuente, que como periodista no estoy obligada a decirlo, estoy haciendo mi trabajo y de última, puede ser algo que opino libremente".
Indignada, Iglesias cerró de manera lapidaria: "No da meterse con la libertad de decir lo que opino... la gente narcisista debe resolver sus problemas en terapia, no en los tribunales".