Sin dudas Moria Casán es una de las figuras más auténticas del mundo del espectáculo. Dueña de una personalidad avasallante y una filosofía de vida que ella misma define como 'de momentismo absoluto', disfruta el presente y corta con todo aquello que la mantiene atada al pasado, así se trate de un hecho ocurrido la semana anterior.
Y estas reglas no sólo rigen en el plano profesional sino que lo aplica en todos los ámbitos de su vida, incluso en el de los lazos afectivos. El vínculo son Sofía Gala, su única hija, es muy especial. Moria la crió con todas las libertades y el desapego que creyó conveniente (aunque la actriz se lo recrimina cada vez que puede) y así lo sostiene hasta el día de hoy.
A modo de ejemplo, alcanza con ver el mensaje de cumpleaños que le dedicó a Sofía: "En este nuevo año de tu vida, amada Sofía Castiglione, logro desprenderme de la adhesividad al propio pasado y adquiero distancia para reconsiderar globalmente mi vida para reorientarla".
Luego, cerró: "Siento que en tu birthday le doy un nuevo comienzo a mi vida. Bienvenida hija mia, renazco con vos, reivindico la soberanía de mi matriz y metafóricamente, te vuelvo a parir. Love".