Como dice la frase “la pasión no entiende de razón” y de esto si que puede hablar Guillermo Andino. Es de público conocimiento el amor que siente el conductor por Racing Club. Pasión que comparte con otros famosos como Guillermo y Nico Francella, Mirtha Legrand y Solita Silveyra. Tal vez, a diferencia de los demás, Andino puede decir que cometió locuras por Racing.
A Guillermo lo hizo hincha de la Academia su tío Pedro. Quién hasta el último día quiso demostrar que la pasión seguía intacta. Así fue como antes de morir le pidió un último deseo a su sobrino: que sus cenizas fueran enterradas en el Cilindro de Avellaneda, como llaman al estadio de Racing.
Andino quiso cumplir el sueño de su tío y se acercó al club para pedir permiso y arrojar las cenizas de Pedro detrás del arco. Pero no fue escuchado el pedido por parte de las autoridades. Fiel a su estilo, el marido de Carolina Prat no se dio por vencido y junto a su primo se pusieron en contacto con un barra del club, que les prometió ayudarlos a dejar las cenizas de Pedro en el verde césped de la cancha.
“Llegó esa noche, y a las apuradas me fui con la urna para la cancha. Pero cuando estamos llegando me pregunta: ‘¿traes pala?, yo le dije que no”, le aseguró el periodista a Pronto en una entrevista en 2009.
La escena se volvió trágica y cómica a la vez, el reconocido conductor de la tele intentaba meterse de infraganti a la cancha y se olvidaba un elemento importante para cumplir su cometido: la pala.
Por lo tanto, tuvo que parar en una ferretería para poder comprarla y seguir su rumbo. “Entré corriendo medio desencajado y le digo al dueño: ‘necesito una pala’, el tipo me pregunta: ‘¿qué tipo de pala?’ y yo en mi desesperación le contesto: ‘una que sirva para enterrar a mi tío’.
El relato de Andino continuó dando detalles de la cara pálida del señor al escuchar su pedido y cómo tuvo que hacer para tranquilizar al dueño y poder explicarle para qué necesitaba una pala.
Al final, todo fue un malentendido y Guillermo Andino, su primo y el barra pudieron llegar a la cancha de Racing y enterrar las cenizas de Pedro.