Una hora y media. Ese fue el tiempo que le llevó a María Becerra (23) vender y agotar todas las entradas para el recital que dará el próximo 23 de marzo en el estadio de River Plate. De esta manera, se convirtió en la primera cantante argentina en clavar un sold out total en el Monumental, con una marca única que quedará para la historia. “Todavía no lo puedo creer, es una locura todo lo que me está pasando”, se sincera la artista oriunda de Quilmes, quien recibió a Pronto para charlar absolutamente de todo.
María se muestra relajada, tranquila y sin creerse al ciento por ciento el exitosísimo presente que está viviendo. Pero su realidad impacta y para entender un poco del fenómeno ante el que estamos parados solo hace falta repasar algunos números: hoy por hoy, María Becerra cuenta con más de 25 millones de oyentes mensuales en Spotify, recibió más de tres mil millones de visualizaciones en Youtube -donde tiene un canal con casi cinco millones de suscriptores-, 11 millones de personas la siguen en Tik Tok, otras 14 millones en Instagram y como si fuera poco, en una carrera meteórica de tres años viajó por todo el mundo y fue reconocida con prestigiosos premios como Latin Grammy, Latin American Music Awards, MTV EMAs, MTV MIAW, Los 40 Premios España, Premios Juventud, Lo nuestro, Premios Gardel y Premios Tu Música Urbano, entre tantos otros. Vogue la definió como “un auténtico icono a seguir”, MTV la calificó como “la artista más grande surgida de Argentina” y Bloomberg la incluyó en su lista de los 500 personajes más influyentes de América Latina debido al impacto que está generando en el ámbito artístico.
Pero ella, la nena de Argentina -tal como se hace llamar a partir del álbum homónimo que lanzó en 2022- parece hacer oídos sordos a esos números e intenta seguir con su vida sin mayores sobresaltos. En pareja con el también cantante J Rei, cuyo verdadero nombre es Julián Reininger, Becerra tiene su base en Buenos Aires pero no para de viajar por el mundo. Hace poco fue premiada en España en la gala de Los 40 Music Awards en el rubro mejor video global latino por Corazón vacío, tema que lanzó en junio pasado y que ya ha acumulado en las distintas plataformas más de 290 millones de streams. Además, María recibió cuatro nominaciones a la 24 edición de los Latin Grammy 2023 en las categorías de Mejor Interpretación Reggaeton y Mejor Canción Urbana por su éxito Automático, Mejor Fusión/Interpretación Urbana con Ojalá y una nominación a Canción del año por su colaboración con Pablo Alborán en Amigos. Y como si esto fuera poco, recientemente se unió al puertorriqueño Chencho Corleone y el productor Ovy On The Drums para lanzar Piscina, una canción muy fresca que invita a bailar con un beat melódico que desde el principio va llevando a quien lo escucha a la sensación del verano en el cuerpo.
-Vayamos a lo más fuerte. ¿Cómo te preparás para cantar en River?
-Ay, ¡la ansiedad me está comiendo el cerebro día y noche! Voy a tener que estar bien al palo con la psicóloga, obviamente, para un proceso así porque no pensé que iba a ser tanto. Estoy teniendo mucha ansiedad porque se me ocurren ideas todo el tiempo. Quiero hacer cosas continuamente, tener reuniones, solucionar situaciones y que la gente ya lo vea. Quiero ya arrancar con los ensayos y practicar ciertas cosas. Mucha ansiedad porque va a ser el show más grande que voy a dar hasta ahora en todo lo que va de mi carrera. Es un logro personal muy grande también y sé que hay todo un país que va a estar al tanto de lo que pase ese día. Entonces, es presión de la buena pero es bastante presión. Por eso, me está comiendo la ansiedad. Pero todavía falta para ese día ¡y no puedo más!
-¿Qué podés adelantar del show?
-Que va a ser increíble. Lo estamos terminando de armar para ya empezar con los ensayos desde ahora. Va a ser muy grande, con una escenografía muy importante y un desplazamiento de mucha gente. Habrá un montón de coreografías, muchos músicos en escena y cosas nuevas, entonces hay que ensayar con tiempo.
-¿Tenés invitados especiales para ese día?
-Sí, sí, sí. No se puede decir quiénes porque la idea es que sean sorpresa. No me gusta que los invitados sientan que estoy vendiendo mi show con su presencia, entonces prefiero no decirlo.
-¡Igual no lo necesitás!
-(Risas) Bueno, qué se yo, no sé. Por las dudas nunca lo digo y me gusta que sea sorpresa para que la gente se asombre también en el momento.
-¿Sos consciente de que estás haciendo historia con este River?
-Sí, sí. Y creo que por eso tengo tanta ansiedad. Es algo muy grande y sé que soy la primera artista mujer de Argentina en llenar un River. Tengo el honor de que me haya tocado esto. Es muy loco porque fui a ver a Taylor Swift en River, también a The Weeknd y flasheé. Se me ponía la piel de gallina todo el tiempo porque veía y escuchaba los shows pero no podía parar de pensar que en un tiempo yo voy a estar ahí. Veía para los costados las gradas, la gente y decía: “Guau, no puedo creer que voy a pisar ese escenario”. Caí un poco tarde pero caí.
-¿Tenés una psicóloga especial para afrontar este momento?
-No, es mi terapeuta de siempre. Tengo mis momentos, no es que voy siempre a terapia. No sé si está bien o mal, aunque mucha gente me dice que debería ir siempre, tipo rutina. Entiendo que hay momentos especiales en los que voy y otros en los que no. Lo voy viendo de acuerdo a cómo me siento.
-¿Quién más te apoya en este momento para que sigas siendo la de siempre y tengas los pies en la tierra?
-Mi colchón emocional es importantísimo, para mí es la prioridad absoluta y es mi familia, mi equipo, mi pareja, mis mascotas, mi casa. Tengo tres perras, que llevan los nombres de mis cantantes favoritas: Dalila, Selena y la otra quería que se llame Beyonce pero la perrita es mía y de mi novio y él prefirió ponerle Sol. Me decía: “¿Cómo la vamos a llamar en la plaza si le ponemos Beyonce?”. Tenía razón y él eligió Sol.
-¿Dalila por la cantante de cumbia?
-Sí, por ella. Es una de mis idolas pero no lo sabe, jamás lo dije. Me encanta cómo canta, me gusta su voz y sus canciones. Tiene una voz muy particular y una forma de interpretar que me fascina. Creo que no lo sabe, nunca le dije nada. La amo. Y Selena es por Selena Quintanilla.
-Qué historia fuerte la de Selena.
-Sí, muy zarpado. A veces pienso que tenía mi edad ella cuando la mataron. Tengo 23 años y pienso todo lo que me falta por vivir, todo lo que tengo por delante y no me entra en la cabeza. Horrible.
-Sos una estrella. ¿Cómo te cuidás de los peligros, cómo te movés?
-Soy una persona bastante casera de por sí y si no estoy viajando por laburo o no tengo que estar afuera por algún compromiso, me quedo en mi casa. Estoy todo el día en casa. Me siento segura, tengo todo lo que necesito y amo mi casa. Me gusta estar allí. Obviamente me manejo con seguridad siempre. Si tengo que salir, me manejo con seguridad. Pero no pienso que alguien me vaya a hacer algo malo. Calculo que Selena tampoco lo pensaba. Cuando salgo sin seguridad es flashero y me doy cuenta de que la necesito. Hay mucha gente que se quiere pasar de viva todo el tiempo; es increíble. Desde querer tocarte de más hasta querer robarte un beso y te arriman la boca o te agarran de la cara o del pelo.
-¿Cuál fue la demostración de cariño más extrema que viviste con un fanático?
-Me han robado besos. También me han manoseado un montón de veces y eso no me parece una muestra de amor. Lo de los besos es porque se desesperaban y me gritaban: “Ay, dame un beso por favor”. Te agarran la cara y te obligan al beso. Eso me pasó dos veces y dije: “Nunca más. Esto no puede volver a pasar”. Me friquea mucho. Que lleguen a ese nivel es horrible porque no es consentido.
-De chica, contaste, sufriste bullying, discriminación y acoso sexual.
-Sí, sí. Fueron muy heavies, mucho más heavy y no se compara ni en pedo porque la pasé mal cuando era chica. Pero las dos son situaciones de mierda y es raro vivir una situación en la que te fuercen a dar un beso cuando no querés. No está bueno. O te tocan la cola o lo que sea. Es super irrespetuoso y no me da gracia. Jamás me reí de eso, no lo festejo porque me parece completamente mal.
-Fuiste premiada en España en Los 40 Music Awards por el mejor videoclip global latino por Corazón vacío. ¿Cómo viviste esa noche?
-Fue maravillosa y estuve muy contenta. Para mí se tendría que haber subido a recibir el premio conmigo Julián Levy, que es el director de todos mis videoclips. Corazón vacío lo planeamos en mi casa, tuvimos una reunión en la que le conté cómo era la historia del tema y él me fue tirando ideas. Empezamos a hacer una lluvia creativa de ideas, ahí nació todo y Juli lo terminó de desarrollar integralmente. Guionó el videoclip y era tal la necesidad de que queríamos que el video transmitiera lo que deseábamos, que cambié la letra de la canción en función de eso. Fue la primera vez en mi vida que hice eso: cambiar una letra de un tema que ya tenía hasta el master hecho para que el video quede mejor aun. Fue muy zarpado Corazón vacío y lo que el video representa para mí.
-Dedicado a las mujeres que crían hijos solas y con un contenido fuerte.
-Sí. La idea era visibilizar lo que pasa y que lamentablemente se normaliza. Hoy en día pasa todo el tiempo. ¿Quién no conoce a una mamá luchona, como les dicen? O como ellas mismas se hacen llamar porque llega un momento en el que te reís de algo que te está pasando y que no está bueno para tratar de alivianarlo. Conozco muchas madres solteras: familiares, amigas y tenía muchas ganas de hablar sobre eso. Fue un desafío hacer una canción verídica y profunda, con un tema tan fuerte como lo es maternar y criar hijos solas. Fue un desafío transmitir lo que quería y usar las palabras correctas porque con temas tan delicados, no se puede malinterpretar nada. Hay que cuidar cada detalle y en el videoclip también. Fue una preparación larga la que hubo para Corazón vacío.
-Te llevaste el premio en España pero cantaste en vivo y hubo problemas con el sonido. Te criticaron mucho en las redes. ¿Cómo te afectó eso?
-A veces, me da ansiedad eso. Antes, cuando me bajaba de mis shows, lo primero que hacía era pedirle el celular a alguien de mi equipo para ver qué videos habían subido de mi show y qué había dicho la gente. Por suerte, eso ya se fue de mí, no lo hago más y hoy cuando me bajo del escenario lo que quiero es disfrutar del evento. Sabía que iba a haber críticas con lo de España porque yo soy la que está ahí cantando y notaba los problemas que había. Me doy una idea de cómo se escuchó y me propuse disfrutar esa gala y quedarme tranquila.
-¿Y después?
-Inevitablemente, sabía que me iba a enterar lo que se había dicho. Tengo redes sociales y entro, entonces leo las cosas. Trato de que no me afecte pero no es fácil porque no es lindo ver lo que dicen de vos. Para nadie es bonito leer cosas hirientes, incluso de los propios fans. Es una paja. Trato de enfocarme en lo que importa, en mejorar cada vez más y seguir estudiando para perfeccionarme. De todos los errores se aprende.
-¿Qué estás estudiando?
-Canto y ahora empecé a estudiar saxofón también. Estoy arrancando a producir, aprendiendo muchísimo todo el tiempo. Ross, mi productor musical, es quien me enseña. La idea es poder producir música: escribir y hacer una canción desde cero, crear la música con la computadora y los instrumentos.
-Piscina es tu nuevo hit. ¿Cómo fue el proceso de armado?
-Hermoso y haber hecho una canción con Chencho Corleone para mí es un sueño cumplido. Es un genio, lo conozco desde Plan B, me crié escuchando su música y siempre quise hacer un reggaetón con él. Me parece un crack total, chantea como los mejores y tenía que ser con él. Tomó su tiempo lograr que se metiera en la canción pero lo esperamos lo que tuvimos que esperarlo.
-¿Se hizo rogar?
-Pero no de una mala manera. Son artistas que tienen canciones por todos lados, giras mundiales, estaba recorriendo todo Latinoamérica cuando lo llamamos y fue todo un proceso. Costó que le llegara la canción, que su manager se la pudiera mostrar porque cuando está en medio de una gira quiere concentrarse y no mirar afuera. Cuando terminó la gira, la escuchó, le gustó y dijo que iba a grabarla. Pero en el medio, él tenía muchos compromisos y pudo grabar recién a los meses. Lo bancamos porque nos había dado la palabra de que iba a estar y que el tema le encantaba. Mandó su verso y la rompió toda. Estoy feliz de haberlo esperado porque escucho su verso y digo: “¡Qué bien escucharlo en esta canción!”. Es la voz que escuché desde chiquita, del reggaetón de la mata y que alguien así quiera hacer una canción conmigo me enorgullece. ¡Es Chencho y lo admiro un montón!
-¿Qué significa para vos saber que un tema se convierte en un hit y lo cantan en cualquier rincón del planeta?
-Eso es tremendo, muy zarpado. Cuando lo estamos haciendo y estamos en el estudio, uno se hace ilusiones porque conocés a tu público y el tipo de música que le gusta. A veces, hago cosas que sé que no van a funcionar tanto pero lo hago por gusto propio. Necesito hacerlo. Y hay otras, como Piscina, que me encantan y que encima sabés que les va a ir increíble. Mi público ama a Chencho como yo, él la rompió y a la gente le fascina su chanteo. Tener esas seguridades está buenísimo pero tal vez también podemos estar equivocados y no es como pensamos. Piscina es un temazo y lo hice con alguien que admiro mucho así que estoy re contenta.
-¿Tenés en vista la próxima colaboración o alguien con quien te gustaría cantar?
-Sí. Hay muchos artistas con los que me gustaría colaborar. Me gusta mucho Myke Towers, Jay Wheeler y Shakira sería un sueño también. Me encanta también Karol G. Hay muchos artistas con los que me gustaría hacer cosas.
-¿Qué vínculo tenés con Tini Stoessel, con quien hiciste el hitazo Miénteme?
-A Tini la siento mi mentora y yo su discípula. Me enseñó mucho y está en la industria hace un montón de años. Cuando sucedió lo de High, que era mi cuarta canción, pensamos en hacerle el remix y ella al toque dijo que sí. Tini ya tenía su trayectoria, su respeto y su carrera armada y sin embargo decidió montarse en la canción. Me re bancó siempre no solo en lo profesional sino también en lo personal y pude contar con ella en un montón de situaciones. Y viceversa. Es una persona muy buena, de oro y me ha enseñado muchísimo sobre la industria. Cuando era nuevita y recién comenzaba, tenía muchas dudas y miedos y Tini tuvo la palabra justa siempre.
-De chica, hiciste un casting para una novela de Cris Morena pero nunca te eligieron. Y hoy estás de igual a igual con Lali Espósito, estrella de las tiras de Cris. ¿Los sueños se cumplen?
-Siempre. Es un flash estar cerca de quienes miraba de chiquita en la tele. Lali es otra persona con una carrera increíble, un montón de años de trayectoria y si bien la conocí en persona y nos saludamos en un evento, no he tenido la posibilidad de profundizar con ella. El encuentro fue muy rapidito porque ella tenía que salir a cantar y no he tenido el tiempo de sentarme y charlar con Lali para conocerla. Por lo que veo, me parece una mina re copada y sencilla, laburadora, tranquila y que no anda en quilombos. Siempre la veo muy honesta y sin ánimo de estar metida en quilombos. Y si dice lo que piensa es desde la honestidad. Se me hace una persona muy sincera.
-Hay una generación de cantantes femeninas locales muy potente. ¿Son amigas o compiten? ¿Cómo lo vivís?
-Entre nosotras está todo piola siempre. Qué se yo. Somos pibas muy tranquis y empezamos medio juntas con Emilia Mernes y Nicki Nicole. En el caso de Tini y Lali, ya venían cantando hacía mucho pero con las chicas arrancamos juntas y nos conocemos hace banda de tiempo. A Nicki la conozco hace un montón y con Emilia hemos compartido mucho más. Yo súper contenta de que cada una hoy tenga su público y su estética bien marcada. Cada cual va por su camino, todas creciendo un montón y nos cruzamos todo el tiempo: en Los del espacio canté con Emi, a su vez Emi sacó una canción con Nicki, y yo con Nicki tengo una canción. Siempre estamos viéndonos, colaborando y pendientes de la carrera de la otra y de ver cómo les va. Es súper bonito porque somos chicas muy tranquilas.
-Los del espacio ya se convirtió en un himno. ¿Cómo viviste el reencuentro con todos esos monstruos para ese tema?
-Fue re lindo. Me trajo recuerdos de antes. Se sabe que todos vivíamos en una casa, nos la pasábamos ranchando y para mí fue muy importante porque nos impulsamos unos a otros. De esto también formaba parte Emilia. Nos conocimos todos muy pequeños y nuevos en la movida. La escena argentina obviamente tenía algo muy fuerte pero no eran tantos. De repente, llegamos nosotros y éramos un montón ahí plagueando. Nos ayudábamos entre nosotros, colaborábamos y estábamos todo el tiempo juntos dándonos consejos laborales y personales. Nos incentivamos un montón entre todos y crecimos muchísimo. Fue una etapa muy bonita, entonces fue re lindo hacer Los del espacio.
-¿Y volverte a encontrar con tu ex, Rusherking?
-Normal. Para mí es como ver a cualquier persona. Es como saludar a la Emi o al Duki. No hay nada raro. Está todo bien.
-¿Qué te pasa cuando mirás hacia atrás y recordás tus inicios?
-Depende. A veces me hubiese gustado hacer algunas cosas diferente, pero creo que a todos nos pasa. Llega un punto en el que ya más avanzada y viva con algunas cosas, decís: “Esto no lo hubiese hecho de tal forma”. Pero creo que todo sirve para aprender. Cuando miro para atrás, pienso que en tan poco tiempo haya pasado todo lo que está pasando me pone muy contenta. Y nunca me hubiera imaginado todo lo que está pasando ahora. Jamás. Siempre confié en mí y me tuve fe pero jamás imaginé que iba a suceder lo de River, por ejemplo. Y tantas cosas más que están sucediendo y que son tremendas.
-¿Qué dicen papá Pedro y mamá Irene del éxito de la nena María de los Angeles?
-Bien, re contentos. Mi familia es muy tranqui, muy normal y lo que a ellos más les importa es que mantengamos siempre el vínculo de la familia y los valores, que a mí también es lo que más me importa. El tiempo de calidad con la familia es re importante y ellos siempre han estado para mí. Les debo todo a mis viejos. Ellos siempre me bancaron en mi carrera musical y cuando tuve que dejar el colegio porque trabajaba. Siempre confiaron en mí. Tengo unos padres increíbles y muchas cosas de las que me pasan no las pueden creer. Están re contentos.
-¿Los ves seguido?
-Sí. No tan seguido pero tenemos muchas videollamadas y comunicación por el celular porque me la paso viajando. Cuando estoy acá, trato de verlos y ver a mis sobrinas, que están en la etapa del crecimiento. Son bebitas pero de repente me voy un mes de viaje y cuando vuelvo, ya crecieron y dicen palabras nuevas. Eso a veces me mata. Son hijas de dos de mis hermanos, de Juan y de Geraldine. Tengo dos sobrinas re bebitas. Trato de estar lo máximo posible porque en esta etapa crecen muy rápido y quiero que tengan el recuerdo de su tía. No que sea la tía famosa a la que vemos poco y no conocemos realmente. Quiero pasar el mayor tiempo posible con ellas y cuando tengo un día libre, trato de verlas.
-Estás de novia con J Rei. ¿Cómo están como pareja?
-Re bien, por suerte. Estamos re contentos. El me acompaña en todo momento, mi amor. ¡Es más bueno! Incluso a distancia siempre está presente. Aunque estemos lejos, se hace notar y no siento su ausencia. A veces hay cambios de horario o hasta ocho horas de diferencia pero él siempre está. La comunicación es difícil y los dos hacemos los esfuerzos que hayan que hacer para poder comunicarnos. Desde que lo conozco, cada vez que volví de viaje me fue a buscar él al aeropuerto y me ayuda con las valijas. Me hace la comidita, es súper atento con todo. Es la mejor persona que conozco.
-¿Qué le trajo a tu vida?
-Uy, ¡un montón de cosas! Creo que principalmente, paz y tranquilidad. No sé, salubridad te diría. Es una persona muy sana. No peleamos nunca, jamás me ha toxiqueado con nada ni yo a él. Nos entendemos mucho y lo lindo es que somos muy parecidos. Nos damos los espacios que hay que darnos cuando el otro está muy cansado, no forzamos nada y nos acompañamos siempre que podemos. Somos re intensos los dos y siempre tratamos de acompañarnos. Pero sobre todo es una persona sana y buena y eso es lo más importante.
-¿No es celoso?
-Cero. Sé que si me tengo que subir a dar un show para cien mil personas, lo hago tranquila porque no me está toxiqueando ni diciendo nada malo. No interfiere para con mi trabajo y lo mío es muy delicado porque mi laburo depende de mis emociones. Si yo tuviera que darte esta nota habiendo terminado de pelear con él, no me sumaría nada en mi vida. El me suma completamente y me da la paz que necesito. Es todo tan alocado este mundo, que necesito esa paz y esa tranquilidad.
-Se comprometieron en Grecia. ¿Cómo fue ese momento y se viene el casamiento?
-¡Se volvieron todos locos cuando lo mostramos en nuestras redes! Ese momento fue un flash y me sentí súper feliz porque la gente se puso contenta por mí y por él. Fue re bonito. Eso es lindo, cuando comparten tu felicidad. Creo que sí, que va a haber casamiento. En algún momento nos vamos a casar. Para mí él es el amor de mi vida y me quiero casar con él.
-Qué lindo, María.
-Sí, re. Estoy súper decidida y quiero que tengamos una familia y todo.
-¿Te imaginás mamá?
-Sueño con ser mamá y siempre lo digo. Es mi gran sueño y quiero ser una mamá joven. Todavía soy joven y si bien no es algo que estamos visualizando ni buscando, creo que cuando tiene que suceder, sucede. En el momento que suceda, los dos vamos a estar preparados.
-¿Cuáles son tus sueños, además de tener una familia?
-Mi sueño es comprarme una casa en Villa La Angostura o en Bariloche, en el medio de la montaña porque es el lugar que más nos gusta con Juli. Es como nuestro lugar del amor. Ahí hemos vivido momentos muy especiales juntos y nos encanta la vida tranquila a nosotros. No nos gusta la joda, el alcohol y preferimos el campo, la tranquilidad y el silencio. Tener nuestra huertita, cosechar nuestras cositas, comer sano. Somos muy de ese mood. Nuestro sueño, entonces, es comprar una casita por Villa La Angostura cuando podamos retirarnos del trabajo y hayamos cumplido lo que creemos que tenemos que cumplir. E irnos a vivir ahí con nuestra familia y estar desconectados de todo.
Nicolás Peralta
Fotos: Gentileza Valeria Osácar y álbum personal de María Becerra