Marisa Brel volvió a la televisión de la mano de Gran Hermano, en su rol de panelista y comentadora se enfrentó arduamente con Laura Ubfal. Fue una luchadora incansable por convertirse en mamá, y así lo logró a través de la subrogación de vientre: hoy tiene a Paloma y Timoteo. Pero hace pocas horas, reveló una situación angustiante que le tocó vivir.
"Detoné porque me pasaron un montón de cosas juntas, y el cuerpo habla, pero estoy bien. Tuve un pico de presión, cuando llegó la ambulancia tenía 16, mientras que mi presión es siempre de 10. Me medicaron hasta que me empezó a bajar de a poco", reveló Brel.
"Vengo de muchas tormentas personales, duelo de mi perrita Eva, problemas laborales. Muchas jaquecas durante cinco días seguidos, insomnio, tos y anginas, y luego de una discusión laboral, me empecé a sentir mal. Se me partía la cabeza con un dolor muy fuerte, yo soy de baja presión, nunca había tenido alta. Llamé a la ambulancia porque me asusté", agregó.
Luego la periodista explicó la causa de su estrés: "Todo esto detonó porque me estafó un matrimonio en 25 mil dólares. Esto sucedió hace dos años cuando vendí mi casa le presté dinero a una pareja amiga que vivía en mi barrio. Ese dinero es de mis hijos, y hasta el día de hoy no supe nada de ellos. Se mudaron, los vivo persiguiendo y lo último que hice fue mandarles carta documento".
Y además tuvo una mala situación con su asistente personal: "En diciembre pasado me estafó mi asistente, Alejandra, cuando descubrí que me había robado miles de clientes, pasó información privada mía, y cuando me di cuenta me empezó a amenazar".
A pesar de los malos momentos que vivió, Marisa no pierde el optimismo y tomó una decisión: "La salud es lo primero, me tomaré un mes sabático, lo que mi cuerpo, mente y alma necesiten".