Súper entusiasmada con su vida familiar, Noelia Marzol se convirtió en una abnegada y orgullosa madre de dos criaturas que la tienen enamorada: Donatello, de 1 año y 11 meses, y Alfonsina, de 5 meses. En pareja con el futbolista Ramiro Arias, la bailarina contó a Pronto cómo hace para encontrar espacios de intimidad con su marido en medio de la crianza de dos bebitos.
"Por lo general, a las 8 de la noche tratamos de que los nenes ya estén los dos bañados y cambiados o que hayan comido y de 8 a 11 es el momento que tenemos más tranquilo para poder hablar. No te digo intimar porque no nos da el cuerpo y eso es cada tanto y con muchas ganas de ponerle huevo a la situación", arrancó contando Noelia.
Y continuó: "Sí podemos tener una charla tranquila de adultos y sin los dibujitos de fondo y los nenes gritando. Aparte los jueves y viernes estoy con las funciones de Sex y Rami arrancó una carrera en la facultad. Son muchas cosas pero nosotros somos felices así".
-¿Les funciona la fórmula?
-Re. Cuando decidimos ser padres, con Ramiro dijimos que no íbamos a postergar los proyectos personales y que no se nos traben las cosas por tener hijos. A mí me hace ruido cuando escucho a personas que dicen que no pueden hacer tal cosa por sus hijos o que dejaron su carrera por criar a los nenes. Todos tenemos diferentes realidades y puede pasar que no te quede otra pero en nuestro caso priorizamos siempre tener nuestros tiempos y espacios más allá de que somos padres presentes.
-¿La maternidad potencia las hormonas y la parte sexual?
-Sí. Igual tengo altibajos con eso. La gran mayoría de los días nos pasa que con Rami tenemos muchas ganas pero cuando llega el momento, estamos tan agotados o vemos que es la oportunidad justa que tenemos para dormir y descansar y entonces se corta todo. Lo importante es que la libido sigue estando y nos falta a veces encontrar el momento. De todas maneras, cada tanto sucede y la pasamos muy bien.
-Para afuera, ¿genera más morbo que hayas sido mamá?
-Últimamente no estoy leyendo comentarios de las redes sociales porque era algo que me estresaba sobremanera. Entonces, dije que no iba a leer más nada y que iba a vivir mi vida sin escuchar a la periferia. Eso me relajó un montón. En las funciones específicamente, en las que tengo contacto con el resto de las personas, me pasa que las chicas se vuelven locas porque les encanta ver a una mujer en un rol empoderado y trabajando y a los hombres no sé si los incentiva más pero por lo menos no es que la situación de madre me quita lo sexy para el afuera. Por muchos momentos, obviamente que lo actúo porque llego tan agotada que no me siento sexy ni puedo estar en ese rol. Lo exacerbo, el afuera lo recibe bien y yo trabajo todos los días mi sex appeal.
La entrevista completa con Noelia Marzol está en la edición digital de mayo de revista Pronto, se puede descargar y leer de manera gratuita haciendo click en este link